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El exministro de Carlos Andrés Pérez y fiel pregonero del neoliberalismo Ricardo Hausmann llamó, de manera abierta, a la Asamblea Nacional en desacato a que conforme un gobierno ilegítimo que convoque a Estados Unidos y países «amigos» de la derecha en Europa y América Latina, para que intervengan militarmente a Venezuela.
«Esta fuerza liberaría a Venezuela de la misma forma en que canadienses, australianos, británicos y estadounidenses liberaron a Europa en 1944-1945», dice Hausman en un artículo publicado a comienzo de 2018 en el portal www.project-syndicate.org.
Haussman, fiel defensor de las políticas del Fondo Monetario Internacional (FMI), dice en su artículo que esta «asistencia militar», sería «semejante a la liberación de Panamá de la opresión de Manuel Noriega por parte de Estados Unidos».
Lo que no recuerda el exministro y jefe de la extinta Oficina Central de Coordinación y Planificación (Cordiplan) durante el segundo régimen de Carlos Andrés Pérez es que la invasión militar de Estados Unidos a Panamá, en diciembre de 1989, dejó al menos 3.000 fallecidos, cuando helicópteros estadounidenses fueron utilizados en una invasión que destruyó a la comunidad de El Chorrillo para capturar al entonces presidente de Panamá, general Manuel Antonio Noriega, a quien acusaba la Casa Blanca de narcotraficante.
En su artículo, Hausmann asegura que la intervención militar extranjera contra Venezuela no «requeriría la aprobación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (que Rusia y China podrían vetar)», puesto que, según él, «la fuerza militar sería invitada por un gobierno legítimo», refiriéndose al gobierno que instalaría la Asamblea Nacional en desacato, que vale destacar sería inconstitucional.
Más adelante agrega que: «La existencia de una opción como esta incluso podría mejorar la probabilidad de que las negociaciones que se están llevando a cabo en la República Dominicana lleguen a un resultado exitoso», en referencia al diálogo que mantiene el Gobierno Nacional con la oposición venezolana.
Hausmann es el mismo que en octubre de 2015 sostuvo una conversación telefónica con el dueño de Empresas Polar, Lorenzo Mendoza, en la que propuso entregar Venezuela al FMI por un préstamo de unos «40 o 50 mil millones de dólares».
Pasado neoliberal, presente guerrerista
Hausmann, quien actualmente es director del Centro para el Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard y profesor de la Práctica de Desarrollo Económico en la Escuela Kennedy de Gobierno de la misma casa de estudios, fue promotor de los paquetes económicos aplicados por los gobiernos de la IV República.
Figuró como miembro de la Comisión Presidencial para la Reforma del Estado (Copre), con la que supuestamente el presidente adeco Jaime Lusinchi avanzó en un plan de regulaciones con acento en el recorte del gasto público.
Fue también uno de los integrantes de los «IESA Boys», encargado de adiestrar a otros prospectos de tecnócratas que se encargaron de envolver, convencer y conducir a Carlos Andrés Pérez a aceptar y poner en práctica una conjunto de medidas económicas neoliberales y antipopulares, como el paquetazo económico que produjo El Caracazo, los días 27 y 28 de febrero de 1989.
Este personaje se sumó en noviembre de 2017 a los pedidos del presidente de Argentina, Mauricio Macri, de aplicar un embargo petrolero a Venezuela. «Yo creo que debe haber un embargo petrolero donde se condicione el flujo de caja del crudo a cambios en el comportamiento del Gobierno de Venezuela», dijo en esa oportunidad, reseña el portal colombiano Portafolio.
Desde 2008 y por voluntad propia, es ciudadano colombiano juramentado por el entonces presidente, Alvaro Uribe Vélez. El acto de nacionalización, realizado el 15 de diciembre de ese año en el Salón Protocolario de la presidencial Casa de Nariño, sirvió para que Hausmann le dijera a Uribe: «Es un honor y orgullo recibir la nacionalidad de un país que siento propio».
AVN