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Foto: archivo
Un promedio de 60 panaderías artesanales han sido incorporadas en Lara, en la región centro-occidental del país, al sistema popular de distribución de alimentos, instrumentado por el Gobierno Nacional para luchar contra la guerra económica
La información se conoció este jueves durante una inspección realizada por uno de los coordinadores estadales de ese sistema popular de distribución de alimentos, Luis Reyes Flores, a una de las panificadoras populares de la parroquia Unión del municipio Iribarren (Barquisimeto), para constatar cómo marcha el proceso de elaboración de panes.
Indicó: «Estas 60 panaderías artesanales han comenzado la producción de un promedio de 20.000 panes de trigo salados y dulces, distribuidos» por los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), instancia que instrumenta el sistema popular de alimentos mencionado.
Indicó que el Ministerio para la Alimentación, a través de la Red de Panaderías Venezuela, «está suministrando la materia prima necesaria para la elaboración de los panes, harina de trigo, azúcar, manteca y mantequilla», entre otros, señaló Reyes Flores.
Resaltó que este suministro de materia prima se mantendrá por parte del Gobierno Nacional para que uno de los elementos esenciales de la dieta del venezolano, el pan de trigo, pueda mantenerse en la mesa de los larenses a través de los Clap.
Panes hechos con esfuerzo, dedicación y amor por el pueblo
Bernardo Rodríguez, uno de los 60 panaderos artesanales incorporados al sistema popular de distribución de alimentos a través de los Clap, dijo: «Aquí estamos, en esta trinchera, luchando para llevar a la mesa del pueblo un pan bueno, sabroso y a precios accesibles».
Rodríguez, junto con su esposa y sus hijos, se dedica a la producción de panes artesanales desde hace ocho años, en un local que habilitó para la producción de panes al lado de su casa, en la comunidad Los Rosales de Barquisimeto.
Explicó que desde hace ocho años comenzaron la producción de panes dulces y salados para la comunidad en la que residen, también para las aledañas. Posteriormente siguieron con la producción y venta de panes en las ferias a cielo abierto.
Con la puesta en funcionamiento del sistema popular de distribución de alimentos, se sumaron a esta iniciativa. «Nuestra primera producción ha sido de 8.000 panes», salados y dulces.
Estos han sido incorporados por los Clap a los combos de alimentos, distribuidos a comunidades de Barquisimeto, específicamente de alta vulnerabilidad social.
«Nosotros producimos alrededor de 7.000 panes a la semana, pero con nuestra anexión a los Clap duplicamos la producción para poder cumplir con las metas de los panes que debemos colocar en los combos», dijo Rodríguez, quien tiene cuatro trabajadores en su empresa familiar, incluyendo uno de sus tres hijos.
Paulo Loyo, uno de los trabajadores de esta panadería artesanal, manifestó su satisfacción de trabajar en esta panificadora familiar desde hace dos años y medio.
«La jornada de trabajo en esta panificadora comienza muy temprano, llego antes de las 6:00 de la mañana y enciendo las máquinas», explicó Loyo.
Posteriormente se incorpora, junto con sus otros compañeros de trabajo, a preparar la masa, amasar la harina, elaborar los panes y hornearlos. «A las 11:00 de la mañana ya hay pan fresco, caliente y sabroso», dijo Loyo con una sonrisa.
«Este es un trabajo que se hace con esfuerzo, dedicación y mucho amor por la gente que lo come con gusto y placer», enfatizó.
El coordinador estadal del sistema popular de distribución y producción de alimentos, Luis Reyes Flores, aseveró que a partir de la próxima semana se proponen como meta la producción de 100.000 panes semanalmente, que serán distribuidos por los Clap a las comunidades larenses.
AVN