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Los representantes de organizaciones sociales de América Latina y El Caribe, que se reunieron este sábado en Perú, en la realización de la Cumbre de los Pueblos 2018, condenaron enérgicamente el acoso político y la guerra económica del Gobierno de Estados Unidos contra Venezuela.
«Reafirmamos nuestra inquebrantable solidaridad con la Revolución Bolivariana de Venezuela. Condenamos enérgicamente la agresión imperialista, la guerra económica y el acoso político contra la Venezuela Bolivariana», declararon estos lideres sociales mediante comunicado.
En la Declaración Final de la Cumbre de los Pueblos se exige respeto al pueblo venezolano, que desde 1999 inició proceso constituyente liderado por el comandante Chávez, de construcción del socialismo y unidad regional.
«Nuestro apoyo para el presidente Nicolás Maduro, sucesor del proyecto histórico impulsado por el comandante Chávez, exigimos el cese de las sanciones ilegítimas y unilaterales contra el pueblo bolivariano, rechazamos la pretensión de la intervención militar en Venezuela bajo el pretexto de ayuda humanitaria; exigimos la no injerencia en las próximas elecciones del 20 de mayo y el respeto a la soberanía y autodeterminación de nuestros pueblos», refiere el texto.
De igual forma expresaron solidaridad al proceso revolucionario que lidera Evo Morales en Bolivia, la Revolución Cubana impulsada por Fidel Castro, y otros liderazgos en la región.
«Manifestamos nuestra inquebrantable solidaridad con el compañero Presidente Luis Ignacio Lula da Silva, quien enfrenta hoy a todo el aparato de la judicialización de la política y el odio de las élites brasileñas, por ser el referente de los oprimidos y excluidos», denuncian.
Las organizaciones sociales alertaron que en al región existe un escenario de confrontación entre las fuerzas progresitas de América Latina y el neoconservadurismo de las élites entreguistas.
«Vivimos una contraofensiva del poder imperial que trata de borrar los avances democráticos y de inclusión social y política que han promovido los gobiernos progresistas en esta última década y media», explicaron.
Por este motivo repudiaron la VIII Cumbre de las Américas que se realizó en Perú, como la expresión de aquellos grupos entreguistas que tratan de recuperar hegemonía.
En la Cumbre de los Pueblos también hicieron un llamado a enfrentar la arremetida que existe contra las condiciones y derechos de la clase trabajadora en el continente y se opusieron a las medidas neoliberales que buscan reducir la inversión pública.
AVN