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Foto: Prensa Presidencial
El presidente de la República, Nicolás Maduro, enfatizó este martes que el golpe de Estado parlamentario que se quiere imponer en Brasil en contra de su par Dilma Rousseff, es un ataque del gobierno de los Estados Unidos (EEUU) contra los pueblos y gobiernos progresistas del continente.
«Es un golpe contra todos. Es contra los pueblos, contra los movimientos progresistas, revolucionarios, nacionales, populares. Es acabar con todos. Es el legado del señor del norte (Barack Obama)», expresó el jefe de Estado en su programa En Contacto con Maduro, que transmite Venezolana de Televisión.
El pasado 17 de abril la Cámara de Diputados de Brasil aprobó el pedido de «juicio político» contra la presidenta Dilma Rousseff, con 367 votos a favor, 137 en contra, siete abstenciones y dos ausentes.
Este miércoles se instaló la Comisión especial de la Cámara del Senado, instancia que decidirá de manera definitiva la realización del juicio político, que para ser aprobado debe obtener el voto de la mayoría simple (41) con un quórum de 42 senadores.
En este sentido, el Mandatario Nacional calificó de infame el golpe en contra de Rousseff, a quien consideró como «una mujer recta, honesta, bravía, valiente».
Puntualizó que este ataque en contra de la democracia brasilera es una estrategia por parte del gobierno estadounidense para neutralizar el desarrollo económico que se impulsó en Brasil, durante estos 12 años de gobiernos progresistas, ocho años de gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva y cuatro de Rousseff.
«Quieren neutralizar al Brasil porque es el gigante del Sur para neutralizar los Brics (alianza conformada por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), para neutralizar Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), para neutralizar la unión de América Latina y el Caribe. Quieren detener a Brasil como potencia el Sur, no quieren que surja como potencia», sentenció Maduro.
De igual forma, rechazó los constantes ataques en contra del líder y expresidente brasilero, Lula da Silva.
AVN