Noticias

24.May.2015 / 08:20 pm / Haga un comentario

El Wall Street Journal publicó una noticia al mismo tiempo que el Departamento de Estado mostró su «preocupación» sobre la libertad de expresión en Venezuela. El informe tiene como base las supuestas «investigaciones» que realizan la DEA y fiscales de Miami intentando relacionar a Diosdado con el narcotráfico. La información presentada por el medio de comunicación estadounidense es una mezcla de opiniones anónimas, juicios de valor por parte de operadores del narco gringo, declaraciones carentes de hilación temporal y especulaciones sin pruebas sobre Diosdado Cabello.

Y todo cobra una dimensión aún más descriptiva cuando se toma en cuenta que el Wall Street Journal forma parte de la constelación de propiedades del gran desinformador global, presidente del conglomerado News Corporation (donde figuran Fox News y la 20th Century Fox), Rupert Murdoch. Y si le acercamos la lupa, nos encontramos que, en su junta directiva, Álvaro Uribe Vélez tiene una silla como parte de la junta directiva.

Otto Reich, diplomático norteamericano metido hasta las narices en el golpe de Estado de abril de 2002 y en todas las conspiraciones (anteriores y) posteriores, expresó el día de ayer con respecto a Nicolás Maduro: «es difícil decir que no tiene culpa ni conocimiento de lo que ocurre a sus alrededores». Diosdado Cabello es el objetivo táctico de la maniobra mediática; el chavismo el objetivo estratégico.

El frágil basamento técnico y periodístico de la noticia recae en los siguientes elementos:

  • Al principio del informe aparecen las declaraciones de Joaquín Pérez, abogado defensor de narcotraficantes y paramilitares colombianos. El mismo que dice que el narcotráfico se movió de Colombia a Venezuela acusando a Diosdado como supuesto intermediario, es aquel que ha defendido ante tribunales estadounidenses a personajes tan oscuros y terribles como Salvatore Mancuso, cuadro paramilitar de Álvaro Uribe Vélez, resposable directo del asesinato de 14 mil personas en el norte de Colombia y principal financista de la reelección de Uribe Vélez en el año 2005. Pérez también ha contado en su cartera de clientes a Jorge 40 (Rodrigo Tovar Pupo), Comandante del Bloque Norte de las Autodefensas Unidas de Colombia, quien también fungió como operador logístico del entrenamiento de paramilitares (con miras a invadir Miraflores) en la Finca Daktari.
  • Rafel Isea y Leamsy Salazar, secuaces protegidos por Estados Unidos, figuran una vez más como la cañería primaria de esta palangre, parte II. Repiten la misma lógica propagandística: despistar cualquier duda sobre la veracidad de las pruebas apelando a un receptor anónimo, inexistente, desprovisto de cualquier relación penal, fiscal o administrativa relacionada al «caso»: «Salazar dice que había encabezado el equipo de seguridad de Cabello, les dijo a las autoridades estadounidenses haber sido testigo de que éste supervisó el envío de un gran cargamento de cocaína desde la península de Paraguaná, en Venezuela, afirmaron personas al tanto del caso» (subrayado nuestro).
  • La exagerada mención a fuentes anónimas, como «funcionarios» del Departamento de Justicia, «ex oficiales de inteligencia de la Guardia Nacional Bolivariana», «fiscales federales de Miami» y la «división élite de la DEA», demuestra la fragilidad de la noticia y, en el mismo impulso, su intención como una operación de propaganda.

El pasado 27 de enero el ultraderechista diario español ABC publicó una artimaña propagandística en la cual Diosdado Cabello supuestamente figuraba como cabecilla del «Cartel de los Soles». La difamación cruzó el Atlántico rápidamente: La Patilla, El Nacional, Tal Cual (y sus subsidiarias) se hicieron con la concesión exclusiva para explotar sistemáticamente la prefabricada calumnia en Venezuela.

¿»Fuentes» o cañerías?

La orquestación de esta maniobra mediática por parte del diario ABC encontró su punto de partida (y de llegada) en las falsas acusaciones que hiciera Leamsy Salazar sobre la supuesta vinculación de Diosdado Cabello con el narcotráfico. Pero más allá de la patraña facturada en dólares, ¿en qué otras cañerías (en este caso, sinónimo de «fuentes») se apoyaron los dueños de ABC para darle aspecto de validez al bodrio noticioso?

El director de ABC, Bieito Rubido, dijo lo siguiente sobre las cañerías utilizadas para publicar la primicia: «Es una información que está más que contrastada. Además, tenemos una gran trayectoria. Le puedo decir que acá nada se publica si no está más que confirmado; en este caso las fuentes son muy serias: desde la inteligencia española, hasta la CIA y la DEA».

  • En Venezuela los grandes circuitos del narcotráfico comenzaron a ser atacados abiertamente cuando el Comandante Chávez expulsó a la DEA del país en el año 2005. Para muestra un botón: luego de esta decisión más de 200 pistas clandestinas han sido destruidas para evitar el tráfico de drogas entre el mayor productor de drogas del continente (Colombia) y el mayor consumidor de drogas del mundo (Estados Unidos). 30 aviones relacionados con el narcotráfico fueron derribados durante el año 2013. 33 narcotraficantes detenidos en territorio venezolano han sido deportados a Colombia, y otros 21 hacia Estados Unidos. Que la DEA haya sido utilizada como fuente expresa los débiles (y mafiosos) basamentos de la primicia.
  • La CIA ha estado vinculada en todos y cada uno de los procesos golpistas y conspirativos contra la Revolución Bolivariana, llámese golpe de Estado, guerra económica, intentos de magnicidio o guarimbas. Otra cañería que excreta, lógicamente, agua pestilente contra la Revolución que no ha podido derrocar. Su utilización como «cañería periodística» demuestra que lo siguen intentando.
  • La inteligencia española estuvo encargada de diseñar el Plan Balboa, específicamente durante la presidencia de Jose María Aznar. Un gobierno que planeó invadir a Venezuela durante el golpe de Estado de abril de 2002 puede tomarse como una «fuente imparcial» para la elaboración de la noticia. Por tal razón, Bieito Rubido reafirma eso «de la gran trayectoria», picando el ojo y sonriendo intranquilo tratando de esquivar cualquier pregunta incómoda.

Par de joyitas

El diario ABC, en medio de los escándalos por corrupción que azotan a España, disfruta de una grandísima responsabilidad apegada a los intereses empresariales y financieros de esa semicolonia gringo-alemana en saqueo continuo. La labor de Bieito Rubido ha sido la de encubrir, omitir responsabilidades y despistar la atención de los ciudadanos con respecto a los crímenes tributarios y fiscales cometidos por la cúpula del PP.

Vea en la siguiente portada del ABC cómo en el caso Bárcenas, uno de los mayores escándalos sobre financiación ilegal de partido alguno en España, brillan por su ausencia los dos principales beneficiarios de los sobresueldos y comisiones (calculados en varios millones de euros) otorgadas por Bárcenas: Mariano Rajoy y José María Aznar. El ABC simplemente se ocupó de reunir en una foto a los actores de segundo grado partícipes del crimen fiscal.

Emili J. Blasco, corresponsal del ABC en Washington, fue el responsable de realizar la entrevista a Leamsy Salazar.

 El infomercenario en cuestión tiene amplia experiencia en amarillismo necrofílico, mostrando sus malsanas habilidades de palangrista cuando el Comandante Chávez estaba en la isla de Cuba meses antes de su fallecimiento.

Ya en el mes de enero decía que el «cáncer era terminal», que «había sufrido varios paros cardíacos» y que las «autoridades cubanas» querían «alejar» a Diosdado Cabello de la Presidencia de Venezuela, tomando como referencia declaraciones del mafioso banquero Pedro Burelli.

Es un fanático de la mentira y de Diosdado. Al igual que Ravell, Teodoro y Miguel Henrique Otero.

Preguntas sin responder

La Patilla, El Nacional y Tal Cual fueron los principales medios en hacer circular la difamación. El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, ante la arremetida calumniadora de los medios (nacionales e internacionales) decidió interponer una demanda contra los directivos de estos laboratorios de guerra mediática.

Una vez decretada la prohibición de salida del país hacia estos actores con el propósito de garantizar el curso efectivo de las investigaciones, las solidaridades automáticas no tardarían en aparecer. Y no sólo las solidaridades en términos «cogolléricos», sino la articulación de un discurso por y para la guerra por parte de actores específicos de la ultra: MariCori empieza a hablar de «Estado mafioso» con mayor recurrencia a partir de ese momento.

Una de las claves fundamentales del Decreto Obama (aún vigente) tiene que ver con la supuesta relación de Venezuela con el narcotráfico. La mediocracia sueña y a veces empreña a los (ultra)interesados en promover la desestabilización y la conspiración permanente.

Las rodillas ya empezaron a temblar. Y en el marco de ese recule es obligatorio plantear la pregunta: si las «fuentes» (mejor dicho, cañerías) son fidedignas, ¿por qué Rubido o Clasco no han sacado los informes de la DEA donde se le acusa a Diosdado? ¿Por qué el diario ABC no reproduce los reportes de la inteligencia española y la CIA? ¿Por qué no aparecen las pistas, los nexos internacionales y las cuentas en Suiza que invisten a Diosdado como el supuesto cabecilla del «Cartel de los Soles»? ¿Por qué Ravell, Miguel Henrique Otero y Teodoro Petkoff no publican la investigación que lleva a cabo Estados Unidos?

Wall Street Journal sube las apuestas en la campaña contra Diosdado Cabello. Y ese golpe de efecto no responderá estas preguntas, no es su fin ni su objetivo fundamental.

Sin embargo, en el contexto actual existe una inercia política por parte de la oposición, orfandad que quedó más que demostrada en la escasa participación que tuvieron las primarias realizadas el pasado día domingo. Ante esta inercia la maniobra mediática intenta cumplir el mismo objetivo preparado desde enero, cuando oficialmente comienza la campaña contra Diosdado Cabello: minar los nexos (afectivos, morales y políticos) del pueblo chavista con sus dirigentes más reconocidos.

Los propietarios de la mediocracia venezolana (La Patilla, El Nacional y Tal Cual), como saben que necesitan ganar tiempo (y apoyos), andan lanzando de forma desesperada luces de bengala con el objetivo de que la moribunda institucionalidad panamericana (OEA, Cidh, SIP, etc.) vuelva a pronunciarse en defensa de la «libertad de expresión», rumiando los escasos activos políticos que les quedan en un escenario pre-electoral para nada alentador. Las declaraciones de Felipe González a favor de la «libertad de expresión» y el premio que le compraron a Teodoro Petkoff van por esa misma línea: ganar tiempo y beligerancia geopolítica.

Luego de la victoria de Venezuela en la Cumbre de las Américas, el escenario político a lo interno se avizora cuesta arriba para ellos, y, en medio de ese panorama, la propaganda y la guerra sucia son los únicos dispositivos que no han sido explotados a cabalidad.

Mientras tanto, Ravell, Otero y Petkoff hacen inconmensurables esfuerzos para disfrazarse de Harina PAN a ver si logran salir vía contrabando de extracción por Ureña.

Misión Verdad

 

Hacer un comentario.




Los comentarios expresados en esta página sólo representan la opinión de las personas que los emiten. Este sitio no se hace responsable por los mismos y se reserva el derecho de publicación. Aquellos comentarios que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto y/o que atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, este sitio se reservará el derecho de su publicación. Recuerde ser breve y conciso en sus planteamientos. Si quiere expresar alguna queja, denuncia, solicitud de ayuda u otro tema de índole general por favor envíe un correo a contacto@psuv.org.ve