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Foto: AVN
A un año de la conformación de los Comité Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), ha aumentado significativamente el nivel de conciencia organizativa y productiva del Poder Popular, en beneficio de la soberanía alimentaria.
Así lo expresó un grupo de líderes populares provenientes de diversos estados del país, durante un programa especial conducido por el vicepresidente para el Desarrollo del Socialismo Territorial, Aristóbulo Istúriz, y transmitido por Venezolana de Televisión.
«Hemos evolucionado; ya no estamos igual que el año pasado. El pueblo ha sabido asumir con fuerza esa guerra económica que nos impusieron desde el 2016. El imperio no sabía que este pueblo podía responder de esta forma», indicó Ana González, representante de uno de los Clap conformados en la parroquia La Candelaria, en Caracas.
Y esa lucha contra la guerra no convencional la ha dado el pueblo con la producción de rubros agrícolas; la elaboración de productos de aseo e higiene personal; y la confección de textiles y calzado, entre otras actividades productivas, dijo Francisco Salazar, perteneciente al consejo comunal Corazón de mi Patria Nueva, del Paraíso.
«El clap es seguridad y sabiduría en nombre del pueblo. El pueblo despertó; nos quisieron callar con esta guerra económica, pero no advirtieron que este es un pueblo sabio. Aprendimos a producir», señaló.
Explicó que el proyecto que desarrollan es la producción de hortalizas en 155 mesas organopónicas instaladas en siete torres.
Ese trabajo emprendido por las comunidades también ha fortalecido la identidad y el acervo tradicional de los venezolanos, ya que «el Clap nos devolvió a nuestras raíces, porque estábamos acostumbrados a comer lo que producíamos, y ya se nos estaba olvidando. El Clap nos ha ayudado a intercambiar saberes”, destacó por su parte Eudis Carry, miembro del consejo comunal Pueblo Unido, en Ocumare del Tuy, estado Miranda.
A partir de la constitución Clap, ha cobrado vigor la conciencia política y social, puesto que, con la metodología de distribución de productos de primera necesidad casa por casa, se ha podido detectar y atender otras necesidades que afectan a la población.
“Con los Clap hemos tenido la oportunidad de acercarnos más al pueblo. Ya somos una gran familia que practica lo que dijo Chávez: solo el pueblo salva al pueblo”, manifestó Alexis Gómez, jefe de calle de uno de los Clap activos en Los Flores de Catia, parroquia Sucre de Caracas.
En esto coincidió Reny Colmenares, de la parroquia La Vega, quien aseguró que el trabajo de los líderes y jefes de calle ha permitido trazar el camino para la consolidación del socialismo en lo territorial.
“Nosotros nos sentamos y hacemos evaluaciones; hay discusiones políticas. Nuestros líderes van casa a casa, ven el día a día, siempre están pendientes. Con esos líderes de calle ya tenemos detectadas las necesidades de la comunidad. Un ejemplo de ello es que ya contamos con cuatro ambientes de la Misión Ribas y Robinson, porque no es solo la distribución y producción de alimentos sino la producción de conciencia”.
Aseguraron que con el impulso de la producción y la creación de nuevas formas organizativas se puede ofrecer a la población otros rubros de primera necesidad a precio justo.
“Si una semana nos llega la bolsa o la caja de los Clap, la otra semana o ese mismo fin de semana planificamos los mercados populares, comunales, con hortalizas, frutas y legumbres, para seguir llevando el alimento de forma constante”, dijo Ana González.
Estos líderes comunitarios mostraron su apoyo al presidente de la República, Nicolás Maduro, y aseguraron que seguirán dando la batalla por la seguridad alimentaria del pueblo venezolano.
AVN