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El presidente del Parlamento Latinoamericano (Parlatino), Carolus Wimmer, expresó este lunes que el camino de la paz en Venezuela continúa «con o sin esa parte de la oposición no democrática» que se rehúsa a dialogar.
Una delegación de ocho cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se encuentran en el país para acompañar el proceso de diálogo que impulsa el presidente de la República, Nicolás Maduro, quien ha reiterado la invitación a la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a participar, sin embargo, sus dirigentes se han negado a trabajar por la pacificación nacional.
«La oposición tendrá que decidir qué hacer. Lo importante es aclararle al pueblo que esa es la vía, la conversación democrática, la aceptación de la constitucionalidad y la legitimidad de los presidentes», expresó Wimmer durante una entrevista en el programa Mesa Informativa, transmitido por Venezolana de Televisión.
Explicó que ante la ola progresista e integracionista que se ha instituido en América Latina, naturalmente la oligarquía se va a resistir a la nueva voluntad de los pueblos, pero es responsabilidad de las instancias internacionales y de los gobiernos «seguir el legado de grandes líderes como el comandante Hugo Chávez y Fidel Castro».
Referente a la violencia promovida por la ultraderecha venezolana en el país desde el pasado 12 de febrero, el diputado destacó la importancia de la alianza cívico-militar para hacerle frente a la desestabilización y el golpe de Estado continuado que pretende derrocar al presidente Maduro.
«Con la fortaleza que existe en la región, podremos llegar a una Venezuela de paz. La vía pacífica va a resultar victoriosa», enfatizó.
Wimmer también resaltó el trabajo exitoso del Ejecutivo nacional en el área internacional, al lograr un respaldo contundente y unánime por parte del Parlatino a la política de no violencia, la instalación de la Conferencia de Paz y el rechazo a la injerencia extranjera en los asuntos internos.
Relató que durante la sesión del Parlatino del pasado viernes, en el cual se discutió el caso Venezuela, diputados de derecha de países como Costa Rica, México, Brasil, entre otros, trataron de boicotear una reunión de trabajo que concluyó, sin embargo, con el respaldo al gobierno del presidente Maduro por parte de 11 países frente a dos en contra y algunas abstenciones.
«Fue una batalla importante, victoriosa, donde contamos con aliados en nuestra región, los aliados son todos los pueblos y las mayorías políticas», apuntó Wimmer.
AVN