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El Gobierno Bolivariano, en nombre de su pueblo, repudió este viernes la nueva etapa de embestida del Gobierno de Estados Unidos contra la soberanía, la autodeterminación y democracia de Venezuela, luego que el presidente Barack Obama anunciara la renovación del decreto ejecutivo en el que señala a la nación suramericana como «una amenaza inusual y extraordinaria» para la seguridad norteamericana.
A través de un comunicado, difundido por la Cancillería venezolana, se señala que la extensión, por una año más, del decreto injerencista firmado por primera vez por el Presidente Obama el 9 de marzo de 2015, constituye una violación flagrante de los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas. En sí, agrega el texto, es una amenaza a los principios de no injerencia.
Más temprano, la ministra para Relaciones Exteriores de Venezuela, Delcy Rodríguez, alertaba sobre los propósitos que están detrás de la renovación del decreto injerencista, al señalar que con ello se pretende, una vez más, alentar a los factores antidemocráticos presentes en el país suramericano y, al mismo tiempo, generar condiciones para la restauración del modelo neoliberal en los pueblos latinoamericanos y caribeños.
La denuncia también quedó plasmada en el comunicado, publicado en la página web del Ministerio para Relaciones Exteriores: «Venezuela denuncia ante la comunidad internacional que esta agresión incita a los factores antidemocráticos y violentos de la oposición venezolana para atentar contra la institucionalidad venezolana y sus autoridades legítimas y constitucionales».
A continuación el comunicado íntegro:
República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores
COMUNICADO
La República Bolivariana de Venezuela repudia enérgicamente la renovación de la Orden Ejecutiva dictada por el Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Barack Hussein Obama, que de forma inexplicable insiste en declarar a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y a la política externa de los Estados Unidos.
El unilateralismo y extraterritorialidad practicados permanentemente en el mundo por el Gobierno estadounidense constituyen una violación flagrante a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas, así como al Estado de Derecho internacional, amenazando la vigencia del multilateralismo y sus mecanismos protectores y garantistas de los principios de no injerencia en los asuntos internos y de igualdad soberana de los Estados.
La República Bolivariana de Venezuela condena el doble rasero del Gobierno de los Estados Unidos, que siendo uno de los países donde la violación de los derechos humanos es una política de Estado, y el belicismo extremo es practicado en regiones enteras del mundo negando de esta forma el acceso masivo de los pueblos a los derechos humanos, pretenda dar lecciones a otros países de lo que adolece intencionalmente para justificar su intervencionismo.
Venezuela denuncia ante la comunidad internacional que esta agresión incita a los factores antidemocráticos y violentos de la oposición venezolana para atentar contra la institucionalidad venezolana y sus autoridades legítimas y constitucionales.
El Gobierno estadounidense, en una muestra más de su arrogancia, ha desatendido los llamados de los pueblos del mundo y de la comunidad internacional, contenidos en las declaraciones de la UNASUR, ALBA, PETROCARIBE, MNOAL, G77 más China y la CELAC, que exigieron expresamente la derogación y no renovación de esta insólita Orden Ejecutiva.
El Gobierno venezolano ha decidido, en consecuencia, someter a revisión integral las relaciones con los Estados Unidos de Norteamérica. Desde este suelo sagrado salió un puñado de hombres a conquistar la libertad y la independencia de gran parte del continente americano. Doscientos años después de esa gesta libertaria, Hugo Chávez reivindicó nuestro derecho a ser libres y soberanos. Venezuela, sus mujeres y hombres de bien, hacemos nuestra la frase visionaria de nuestro Padre de la Patria, Simón Bolívar:
«Los Estados Unidos parecen destinados por la providencia para plagar la América de miseria en nombre de la libertad».
AVN