Opinión / Noticias / Eduardo Piñate
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En la segunda semana de la campaña electoral, el candidato del Frente Amplio de la Patria, Nicolás Maduro, nuestro candidato, intensificó su presencia en los estados, con importantes concentraciones populares combinadas con acciones de gobierno, principalmente en el área económica. Por ejemplo, la inauguración y puesta en funcionamiento del hotel Humboldt en el Waraira Repano, que expresa el dinamismo que nuestro Gobierno Revolucionario le está imprimiendo al motor turismo de la Agenda Económica Bolivariana; y la activación de la Zona Económica Especial Guarenas-Guatire. Mientras tanto, las fuerzas políticas y sociales del chavismo ocupan el territorio con movilizaciones, puntos de agitación, recorridos casa por casa, afiches, pendones y murales. Pero no nos debemos confiar, ni dejarnos ganar por el triunfalismo, hay que trabajar duramente los días que nos quedan de campaña.
La oposición acaba de dar un espectáculo desde el exterior, cuando un inexistente, por ilegal e ilegítimo, órgano paraestatal, en connivencia con la Asamblea Nacional en desacato, “decidió” la “destitución” de Nicolás Maduro de la Presidencia de la República. Sentencia inaplicable por inconstitucional e ilegal y porque sus promotores –la oposición venezolana, apoyada por los gobiernos de EEUU, Colombia, España y otros- no tienen la fuerza material en el país para aplicarla. Es como para morirse de la risa; pero estamos claros que ese expediente que van montando es para crear un estado de opinión pública internacional para justificar el incremento de las sanciones, del bloqueo financiero y una intervención extranjera. Por eso conviene no subestimar al enemigo y estar preparados como pueblo para seguir resistiendo y vencer con Nicolás Maduro al frente.
El otro acontecimiento tiene que ver con Banesco, pero el espacio no alcanza, lo analizamos otro día. Seguimos venciendo.