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El 28 de junio de 2009 el Ejército de Honduras da un golpe de Estado al presidente de ese país Manuel Zelaya.
La oligarquía hondureña orquestó el golpe de Estado a través de la Corte Suprema de Justicia quien manda a los militares a detener a Zelaya.
En 2009, Zelaya pretendía realizar una consulta popular para convocar una Asamblea Nacional Constituyente, con la intención de modificar la constitución de 1981. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia, junto al Tribunal Supremo Electoral, la Fiscalía General y el Congreso Nacional se opuso a la consulta, al estar manejado por conservadores y opositores al gobierno de Zelaya, reseñó Telesur.
«Es el formato elaborado por la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos, es tal cual el formato, ellos saben bastante de eso, es guerra psicológica», denunció El Comandante Hugo Chávez de contacto telefónico por Telesur el 29 de junio de ese mismo año.
Zeleya fue derrocado y deportado a Costa Rica por ser un mandatario que atendió la dignidad de su pueblo. Su gobierno se caracterizó por reivindicar a los hondureños a través de distintos programas sociales, el país logró un incremento económico.
A 14 años de este suceso, demuestra la mano fascista imperial contra los gobiernos de izquierda que apuestan por un mundo pluripolar en América Latina.
Con el Mazo Dando