Opinión / Eduardo Piñate

16.Nov.2014 / 02:33 pm / Haga un comentario

A despecho de algunos opinadores y algunas opinadoras de derecha y de izquierda, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ha venido profundizando la democracia en su vida interna. Esta cualidad se ha hecho más que evidente este año 2014.

Los clásicos del marxismo, principalmente V.I. Lenin, concibieron al partido revolucionario como la prefiguración de la sociedad que aspiraba construir. En ese sentido, el PSUV tiene que encarnar en su vida interna las virtudes democráticas de la sociedad Socialista, Bolivariana y Chavista que estamos edificando en Venezuela.

La Revolución Bolivariana tiene como finalidad la refundación de la República, para construir una sociedad justa y amante de la paz, en un Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia, cuya base es la participación y el protagonismo popular. Esto, que se dice rápido, expresa constitucionalmente el proyecto político revolucionario que defendemos y construimos bajo la dirección del Comandante Supremo Hugo Chávez y continuamos con el liderazgo de Nicolás Maduro, en un largo combate que nos va conduciendo al Socialismo.

Uno rasgo fundamental de nuestro Socialismo Bolivariano y Chavista es su carácter profundamente democrático. Nuestro Socialismo entiende la democracia como el ejercicio directo del poder por parte del pueblo, es decir como un proceso en el cual nuestro pueblo diagnostica, analiza, planifica, ejecuta, controla y evalúa, los planes, programas y proyectos en todos los espacios y todos los días. Es decir, es la acción de ejercer el poder desde el ámbito local hasta el nacional y de manera cotidiana. Así concibe nuestra Revolución el Poder Popular.

Así es y debe seguir siendo cada vez más nuestro Partido. Los principios organizativos contenidos en nuestros estatutos así lo dejan ver. Esos principios son: cohesión política-ideológica; centralismo democrático; dirección colectiva en todas las instancias; rendición de cuentas ante las instancias de dirección y ante el pueblo; revocación, producto de la evaluación de la gestión, realizada democráticamente; ejercicio constante de la crítica y la autocrítica y ejercicio de la emulación socialista.

Como se ve, no estamos hablando solamente del aspecto electoral de la democracia, nos referimos, sí, al abanico de métodos para la toma de decisiones que establecen nuestros estatutos. Este año, entre abril y julio, el PSUV desarrolló un debate desde las bases (Unidades de Batalla Bolívar-Chávez, UBCh), de todos los documentos del III Congreso de nuestro Partido y dicha discusión tuvo un primer punto culminante en la plenaria del III Congreso que se realizó a finales del mes de julio, luego volvió a convocar al III Congreso en septiembre para la formulación del Sistema de Formación del Partido, realizó también el II Congreso de la JPSUV, con un proceso de discusión desde las bases similar al que realizó el Partido. Hoy podemos decir más que nunca, sin temor a equivocarnos, que la línea política estratégica del PSUV es el producto del debate y la elaboración colectiva.

Tanto para el III Congreso del PSUV como para el II Congreso de la JPSUV, las delegadas y los delegados fueron electos democráticamente, en elecciones universales, directas y secretas, los primeros, y en asambleas de la militancia, los segundos. Ambos métodos democráticos presentes en nuestros estatutos.

Hoy estamos desarrollando un proceso de reordenamiento del Partido que nos conducirá a pasar del Partido maquinaria electoral, al Partido movimiento para dirigir la Revolución Bolivariana, Socialista y Chavista. Pasamos de una vanguardia de 40 militantes a 100 integrantes por UBCh y de 4 a 10 patrullas por cada una de estas organizaciones de base del PSUV. También estamos en el proceso de renovación de todas las instancias de dirección del Partido, proceso que comienza este 23 de noviembre con la elección (universal, directa y secreta) de las y los responsables de los Círculos de Lucha Popular (agrupaciones de entre 2 y 5 UBCh en un territorio específico) y continua el 29 y 30 de noviembre, y 6 y 7 de diciembre con la elección en asambleas de militantes de las jefas y jefes de UBCh y de patrullas.

Ningún partido político en Venezuela, mucho menos los de la derecha que tanto discursean sobre la democracia, tiene la experiencia democrática que está desarrollando hoy por hoy nuestro Partido Socialista Unido de Venezuela. No siempre ha sido así, y tampoco afirmo que alcanzamos la perfección, seguramente todavía quedan lunares en algunas partes, pero lo esencial es que hoy somos el Partido político más democrático en Venezuela. Democracia en la elaboración de la política y en la elección de nuestros dirigentes. Esta es la concepción correcta de la democracia en el Partido revolucionario que creó el Gigante Hugo Chávez.

Caracas, 16 de noviembre de 2014

 

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