José Vicente Rangel

  • ¿Latinoamérica vira a la derecha?

    El proceso de cambio que se opera en Latinoamérica, con logros importantes en cuanto a participación popular, en lo económico, social y cultural, luce actualmente estancado o, para ser más exacto, acusa un evidente retroceso. La izquierda y los sectores progresistas de la región asumieron la vía pacífica en diversos países. La derecha, que tradicionalmente ejercía la hegemonía, fue derrotada con sus reglas de juego. Las victorias electorales se sucedieron con reiterada frecuencia. El adversario, desconcertado, no atinaba a explicarse lo que ocurría. Éxitos en naciones de América Central y en países como Ecuador, Perú, Chile, Argentina, Paraguay, Bolivia, Uruguay, Brasil, Venezuela, confirmaban lo acertado de una estrategia electoral que hasta entonces había fracasado.

  • La Trampa

    Sorprende que dirigentes políticos fogueados, con amplia experiencia y capacidad intelectual, se dejen atrapar por el odio y coloquen al país en un disparadero. O mejor: contribuyan a echarle más fuego a la crisis que afecta a todos por igual, tanto a partidarios del gobierno como de la oposición y al pueblo en general. Hago esta caracterización del momento porque la responsabilidad en lo que sucede es compartida.

  • Sobre vivos y pendejos

    En política existe la tendencia a pasarse de vivo. Desde luego, sobre la base de que los otros son pendejos. O como se dice en lenguaje coloquial, “cogidos a lazo”. Pero con los avances culturales que ha tenido el pueblo, logrados durante el proceso bolivariano; con la manera como el venezolano accedió a la política, participando activamente en ella a través de sus distintas expresiones ideológicas y partidistas, y a la forma como asume la Constitución, la cual enarbola como emblema democrático y de justicia –incluso por quienes la cuestionaron y ahora reconocen sus bondades–, ya no hay lugar para el engaño. El que se deja engañar lo hace a conciencia, buscando algún beneficio.

  • El acoso

    Nunca se había visto algo similar. El acoso que adelantan contra Venezuela siniestros intereses, internos e internacionales, no tiene precedentes. Ni siquiera en el caso de sórdidas dictaduras del pasado, como la de Pinochet en Chile, la de los militares en Argentina, o la de Pérez Jiménez aquí.

  • El dilema: estabilidad o caos

    Debatir es fundamental en una democracia. Abordar todos los temas sobre la situación del país, no excluir ninguno, es básico

  • ¿Qué hacer si llega el lobo feroz?

    1 Lo que hoy escribo contiene reminiscencias del pasado, crítica y autocrítica, percepción de la realidad, preocupación, optimismo. ¿Motivo?: el clima existente en el país. La angustia creciente. Expectativas que surgen y se desvanecen. La impresión de muchos compatriotas de que algo va a pasar -como en el cuento de García Márquez. ¿De verdad va a pasar algo extraordinario, distinto a lo que cotidianamente depara el vórtice en que vivimos? Voy al grano. Ante todo, no pretendo alarmar. Pero sí que tomemos conciencia de la delicada situación por la que atraviesa Venezuela. Situación económica difícil, ante la cual el Gobierno hace cuanto puede -y un poco más- para sortearla. Situación política complicada por dos razones: características de la oposición y descarada injerencia de EEUU en los asuntos internos del país. Ahora bien, lo que ocurre no es para deprimirse. Al contrario, sirve para estimular la capacidad combativa del pueblo venezolano; para tomar conciencia de los desafíos que ponen a prueba. Que conste, lo que escribo no es retórica. Quienes me conocen saben que no la practico.

  • ¿No hay responsables?

    1 A cualquier ser humano -con un mínimo de sensibilidad- seguramente lo afectarán las fotos de unos jóvenes esposados, detenidos durante las acciones violentas que se suceden en el país. Particularmente en los municipios Chacao, Sucre, Baruta. Protestas que no tienen nada que ver con el derecho a manifestar y que siempre culminan con actos vandálicos, como la quema de universidades, ataques a dependencias del Estado (ministerios, bancos, instalaciones de salud), colocación de trampas mortales donde han perdido la vida varios motorizados, actuación criminal de francotiradores, agresiones a propiedades privadas (supermercados, abastos, estacionamientos, unidades de transporte), todo lo cual obliga a la reflexión sobre la responsabilidad en lo que sucede. Hechos que mantienen en vilo a la ciudadanía y cuyos efectos en el exterior alimentan la conjura contra Venezuela.

  • ¿Quiénes mueven las piezas?

    1 En el tablero de la desestabilización en Venezuela la pregunta es pertinente: ¿Quiénes se mueven detrás del plan golpista? ¿Quiénes lo alientan? ¿Quiénes lo financian? En concreto, ¿quiénes son los que mueven las piezas en el tablero?

  • La dialéctica de las pistolas

    Por José Vicente Rangel / El fascismo siempre ha sido el último recurso de la burguesía en tiempos de crisis.