Opinión / Noticias / Antonia Muñoz
Hoy quisiéramos escribir sobre la derrota de la oposición en su pretensión de imponer una Ley de Propiedad de la Vivienda, disfrazada y desmejorada socialmente en comparación con la Ley de Propiedad de la Vivienda Familiar elaborada y aprobada por el Gobierno Bolivariano de Venezuela. Igualmente nos gustaría detallar artículo por artículo para intentar convencer a los incrédulos que la ley de Amnistía y Reconciliación Nacional no es más que una burda patraña para que se siguiera entronizando en el país la impunidad de los delitos de diferente naturaleza, lo que sin lugar a dudas es un abono a la violencia política practicada por la derecha. También quisiéramos expresar con detalles la desazón que nos produce, el hecho que el ejercicio de un derecho político con rango constitucional como es el Referendo Revocatorio del mandato en contra de quienes son electos por decisión popular, se convierta en un desagradable intercambio de improperios, cuando debiera ser un procedimiento más expedito sin que esto signifique saltarse pasos ni violentar la ley. Finalmente, pudiéramos celebrar el ascenso al panteón nacional del artista plástico de la luz Armando Reverón y del gran creador teatral, el maestro César Rengifo.
Sin embargo, necesitamos insistir en la necesidad de buscar la EFICIENCIA, TRANSPARENCIA y EQUIDAD en la distribución y venta de bolsas de comida a nivel de hogar, como una medida coyuntural a corto plazo. Para efectos a corto y mediano plazo tiene una gran importancia sincerar las estructuras de costos como una manera de minimizar la acción de los bachaqueros, disminuir la inflación, disminuir las desesperantes colas, estimular la producción. En otras palabras, comenzar a destrancar el juego económico ¿Y por qué somos tan repetitivos con el tema económico? Simplemente porque la producción y distribución de alimentos es una de las mayores debilidades del gobierno bolivariano y ha sido utilizada muy bien por la derecha para convencer a buena parte de las y los venezolanos en relación a que la única salida es retroceder a la derecha, cuando el verdadero cambio que representa el fascismo a lo externo, es abrirle al imperio norteamericano las puertas del país de par en par, tal como lo hizo Juan Vicente Gómez en 1908.Después de 90 años ya saben lo que encontramos.
Para producir cambio en lo económico hay que tomar varias medidas, entre otras sincerar las estructuras de costo. A manera de ejemplos: con el maíz blanco al productor a Bs.15 y ganancia de la agroindustria de 7 %, el costo de producción de 1kg de harina precocida está entre Bs. 75 y 100. Si nos empeñamos en que 70 % de la producción sea de harina a Bs. 19/kg, el 30% restante será de harina mezclada con arroz y los agroindustriales les pondrán el precio que les venga en gana, para supuestamente compensar las pérdidas de producir a costos irreales. ¿No será mejor fijar el PV Justo y aplicarle la ley a los especuladores y usureros? Con la pasta alimenticia pasa otro tanto. El precio de Bs. 15 por kilogramo es irreal. Según información de gente que trabaja en el ramo, producir 1kg de pasta cuesta Bs. 136 sin el interés que debe ganar la agroindustria. Si la ganancia es 10, 20 ó 30% el Precio de Venta Justo debe ser: Bs 149,6 ; 163,2 ó 176,8/ kg. En este momento 1kg de pasta en el pastificio privado de Portuguesa está marcado (PMVP) en Bs. 453, 21. El PMVP de la marca Primor (Polar) es de Bs. 480 ¿No será mejor sincerar la estructura de costo?
Si hablamos del arroz, tenemos que a mediados de marzo del 2016 SUNDDE fijó en Bs. 120 el precio de 1 kg de arroz con hasta 10% de granos partidos. Sin embargo, en Portuguesa que se produce este alimento, 1kg del apetecido grano saborizado, la semana pasada estaba en Bs 490 (Mary) y Emy (430). Ayer en Guanare en el Abasto los hermanos estaban vendiendo por persona 4 kg de arroz saborizado “El marqués” en Bs. 2.640, lo que significa 1 kg. de arroz a Bs.660. El arroz regulado nadie lo encuentra, a menos que no pase unas 5 horas haciendo cola en el Bicentenario. Además, donde lo venden, allí estarán siempre los bachaqueros como “caimán en boca de caño”, para luego revenderlo al precio que les parezca, porque saben que no habrá justicia que los toque. El arroz que se encuentra es el no regulado y saborizado con químicos (Sabor a pollo, pimentón, ajo).La explicación: hay que compensar las pérdidas de producir a precios regulados.
Lo de los Alimentos balanceados para animales (ABA) es escandaloso, sobre todo porque la materia prima se importa y conocemos los precios del maíz amarillo y de la harina de soya a nivel internacional: Estas 2 materias primas representan entre 90 y 95% de la mezcla para preparar los ABA. Un saco de 45 kg de Alimento balanceado para gallinas ponedoras, pollos de engorde, porcinos o peces, no debería pasar de Bs. 2.000: Sin embargo, en el mercado está por encima de Bs. 15.000. La pregunta es ¿Quién está robando al pueblo venezolano? Por este atraco sin pistolas es que anda por las nubes el precio de los huevos, la carne de pollo, la carne de marrano y la carne de peces producidos en lagunas. Aunque en relación a los peces de rio y de mar, uno se pregunta si también subió el alimento que le dan al lebranche de la laguna de Tacarigua o al coporo del rio la Portuguesa. Algo tenemos que hacer. ¡CHÁVEZ VIVE. LA LUCHA POR LA PATRIA SIGUE!
Guanare, 11 de mayo de 2016.