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Foto: Prensa presidencial
El presidente de la República, Nicolás Maduro, expresó este jueves que el golpe de Estado del 11 de abril de 2002, contra el comandante Hugo Chávez, «no ha cesado», por ello, instó a «trabajar para cerrar el ciclo de golpismo de la derecha en Venezuela».
«Cerrar el ciclo del golpismo es el objetivo que me he propuesto y le digo a las fuerzas bolivarianas y a la oposición que trabajemos para lograrlo. Cerremos el ciclo de desconocimiento de la Constitución por parte de ustedes (la oposición)», enfatizó el mandatario desde la parroquia 23 de Enero de Caracas, donde conmemoró el primer aniversario del Gobierno de Eficiencia en la Calle y los 15 años del primer referéndum consultivo convocado por el comandante Chávez.
El presidente indicó que desde que la derecha venezolana inició, en abril de 2002, un golpe de Estado que «ha sido continuado hasta la fecha, no han dejado de conspirar, salvo en pequeños momentos electorales. Van a elecciones a acumular fuerzas y luego pasan los comicios y al día siguiente empiezan la guarimbas».
«Señores de la oposición, ustedes tienen que reconocer que en Venezuela hay una fuerza determinante y mayoritaria que es el pueblo bolivariano, chavista; tienen que reconocer esa realidad, no pueden seguir desconociendo que hay un caudal, una corriente gigantesca, revolucionaria, socialista y seguir actuando haciéndole daño al país», insistió.
Maduro conversó con los familiares de las 19 personas fallecidas y de los heridos durante el golpe de Estado de 2002, que ahora se agrupan en la Asociación de Víctimas del 11 de Abril de 2002, quienes participaron el pasado jueves en las mesas de paz que impulsa el Gobierno nacional con representantes de la Mesa de la Unidad (MUD) y cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Yesenia Fuentes, presidenta de la asociación, manifestó que luego de 12 años de los hechos, por primera vez la oposición venezolana reconoce que luego de su actuación inconstitucional de aquellos años, existen heridos y sobrevivientes de la masacre de puente Llaguno, lugar donde las fuerzas revolucionarias se encontraban defendiendo la Constitución y el mandato del entonces presidente Chávez, cuando fueron sorprendidos por francotiradores y efectivos de la extinta Policía Metropolitana (PM).
Reiteró que luego de siete años de un largo juicio que culminó con la sentencia de 30 años de cárcel para los comisarios policiales y oficiales de menor rango por los delitos de homicidio calificado, consumado, frustrado, en grado de tentativa, lesiones gravísimas, graves, menos graves, uso indebido de arma de fuego y de guerra, la asociación rechaza la petición de amnistía que insiste en plantear los representantes de la MUD.
«Estamos en tiempo de justicia y no de perdón», añadió Fuentes, a lo que el presidente Maduro apuntó que es «la justicia la única vía para identificar, castigar y evitar que se repita la violación de derechos humanos, en eventos como estos del 2002 que le costaron la vida a inocentes que defendían la Constitución».
Ante la solicitud de la asociación, el jefe de Estado anunció que el vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, será el encargado de analizar cada caso para que el Estado les otorgue una indemnización justa, así como las garantías de que todas las víctimas reciban justicia.
«El derecho de las víctimas a la justicia y una indemnización justa es lo que estamos defendiendo en la Conferencia Nacional por la Paz y en los diálogos de paz con la oposición, no estamos para para defender a victimarios», expresó.
Asimismo, hizo un llamado a perdonar a los culpables, puesto que «la justicia no está reñida con el perdón y el perdón es parte del legado espiritual más profundo y sensible del ser humano».
«Que se haga justicia, pero en nuestro corazón no guardemos resentimiento y continuemos la lucha contra el golpismo por ustedes, para ustedes y por las millones de personas humildes despreciados por esta oligarquía», señaló.
AVN