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Foto: AVN
La desidia permanente y la ausencia de políticas públicas en el estado Miranda, al centro norte del país, signaron la gestión del gobernador saliente y dirigente de Primero Justicia, Henrique Capriles Radonski, desde el 2009 hasta el 2017.
Así lo denunció este martes la presidenta del Consejo Legislativo de la entidad, Aurora Morales, en compañía de legisladores y constituyentes, quien señaló que Capriles no cumplió con las promesas electorales e irrespetó las leyes venezolanas y al pueblo mirandino.
«Capriles no cumplió absolutamente nada. Él irrespetó y violó la constitución nacional y regional. Desconoció los deberes del Estado e incumplió con el deber de corresponsabilidad entre en Ejecutivo y la Gobernación», señaló desde la sala de sesiones del parlamento en Los Teques.
Morales reiteró que pese a que Miranda es la segunda entidad que recibe el mayor situado constitucional, después del Zulia, no existen políticas en materia de cultura, educación, deporte, alimentación, vialidad y salud, aun cuando recibe el presupuesto completo y de manera oportuna. Desde el 2013 al 2017 se le ha incrementado un 3977% al presupuesto regional.
Sobre la excelencia educativa, sector que utilizó Capriles como su bandera y promesa de campaña, dejó como resultado una deuda gigantesca con los trabajadores de la educación y adscritos a la Gobernación, fracasó el Programa de Alimentación Mi Pae, se evidencia ausencia en dotación de escuelas, así como el aumento de la deserción escolar en un 30%, demostrando el creciente deterioro en la infraestructura educativa.
«Todas estas deudas se fundamentan en una distribución intencionalmente arbitraria con respecto a los créditos adicionales y la falta de voluntad política para cumplir con los compromisos contractuales. Capriles ha sido arbitrario, antidemocrático e intolerante en sus decisiones afectando al pueblo y los trabajadores. Su gestión ha sido ineficiente y de una ausencia absoluta, para solo encabezar las guarimbas en Miranda», enfatizó.
Sostuvo que pese a que Capriles prometió garantizar la seguridad alimentaria de los mirandinos, sólo invirtió el 0.98% del presupuesto total. El programa Hambre Cero solo distribuyó durante el 2016 unas 9.983 bolsas a igual número de familias y expendió unas 4.000 cestas de alimentación, cuando en Miranda se contabilizan más de un millón de familias en toda la geografía de la región.
«Existe un aproximado de un millón de familias y solo se distribuyó alimentos a 14.884 familias, representando el 1,4% en toda la entidad. Capriles no respondió a la seguridad alimentaria. Esto quiere decir que el gobernador no quiere resolver los problemas del Estado. Podemos concluir que Capriles y Primero Justicia fracasaron en Miranda», señaló.
Asimismo denunció que Capriles se dedicó a instigar a la violencia y a la promoción de odio en la entidad. Además mermo la capacidad operativa del cuerpo policial estadal y desmanteló esta instancia, perjudicando a habitantes y visitantes de la región.
«Fue rebajando y disminuido el personal del cuerpo de seguridad que fue intervenido recientemente por el Gobierno nacional en atención a las denuncias. Nosotros (como Gobierno revolucionario) estamos comprometidos en apoyar a la Policía de Miranda a los fines que puedan cumplir con la paz y convivencia de la región», dijo.
AVN