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Foto: AVN
La derecha internacional avalada por la Organización de Estados Americanos (OEA) está retomando su papel inquisidor para intervenir en los asuntos internos de los gobiernos progresistas, a fin de justificar una intervención e irrumpir el orden constitucional, sostuvo este jueves Roy Cháderton Matos, diplomático y ex embajador de Venezuela ante la referida organización.
Cháderton indicó que desde el golpe de Estado en 2002 en contra del presidente Hugo Chávez, la OEA ha pretendido intervenir en los asuntos internos del país.
«En la asamblea general de la OEA en 2002, se propiciaron los mecanismos para activar la carta democrática en Venezuela con la excusa de la ruptura del orden institucional, luego de los hechos golpistas en contra de Hugo Chávez. Pese al establecimiento del orden democrático, tuvimos que sostener una serie de negociaciones para que la institución reconociera a Chávez como jefe de Estado», dijo.
En este sentido, señaló que los gobiernos de derecha de Chile, Argentina, Paraguay, México, Colombia y Brasil se han sumado a las acciones intervencionistas promovidas por los Estados Unidos, en el seno de la OEA, erigiéndose como jueces para intervenir en los asuntos internos de Venezuela.
Añadió que las pretensiones de Estados Unidos, escudado bajo su poder militar, buscan neutralizar al pueblo e invadir su soberania para controlar la riqueza petrolera. «La clase dirigente gringa siente un profundo desprecio hacia los venezolanos. Su único interés es alcanzar el dominio del petróleo», expresó.
Con respecto a las actuaciones de la oposición, promovida y financiada por la derecha internacional para generar un clima de desestabilización a través de hechos violentos como los ocurridos el pasado miércoles en la misa del Nazareno de San Pablo, Cháderton indicó que los representantes de la Iglesia católica venezolana deben convertirse en un puente mediador para dirimir las diferencias entre los factores políticos del país.
«Los chavistas y militantes de la Revolución Bolivariana hemos construidos los canales para conseguir una mediación e insistimos en que el diálogo es la vía para la resolución de conflictos. El único grupo que se ha negado a dialogar es la ultraderecha», recalcó.
AVN