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Cuatro personas murieron y otra resultó herida por disparos de un exmarine de Estados Unidos contra varias viviendas en el condado de Polk, en Florida.
El tiroteo, que causó la muerte de un bebé de tres meses y su madre de 33 años, ocurrió el domingo en el condado de Polk, en el centro oeste del estado estadounidense de Florida, cuando un exmarine que dijo ser “un superviviente” disparó indiscriminadamente contra varias viviendas, informaron las autoridades.
El sospechoso, que fue detenido tras resultar herido en el enfrentamiento con las autoridades, estaba vestido de camuflaje, con un chaleco antibalas, y dijo que había ido para un tiroteo.
En el ataque resultó herida con múltiples disparos una niña de 11 años que está siendo tratada en el hospital Tampa General.
El alguacil del condado de Polk, Grady Judd, subrayó que hay “cero conexión entre el asesino y las víctimas” y que el agresor estaba bajo el efecto de metanfetaminas.
Hispantv