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Foto: Con el Mazo Dando
Tras sufrir una moción de censura por parte del parlamento, el presidente de Guyana, David Granger, es obligado a abandonar el cargo, bajo la acusación de despilfarrar la riqueza petrolera que el saliente mandatario habría entregado a la estadounidense Exxon Mobil, que señalan impuso condiciones leoninas en detrimento del país suramericano.
La destitución llegó producto del voto de los diputados del Partido Progresista del Pueblo, tolda que se opone a la política depredadora de los recursos que emprendió Granger de la mano de la petrolera estadounidense, así como a la política exterior belicista que impulsaba el saliente mandatario guyanés contra Venezuela.
Producto de esta decisión del parlamento guyanés, se deberán realizar elecciones en un lapso no mayor a 90 días, por lo que se estima que en el mes de marzo los guyaneses acudan a la urnas para elegir al nuevo mandatario de esta nación suramericana.
El destituido Granger, es un militar retirado que desde que alcanzó la presidencia de Guyana se sumó a la cruzada internacional que libraron voceros de la derecha internacional contra el Gobierno Bolivariano, sirviendo así al guión imperial de agresiones contra Venezuela, siendo su papel el de provocar un conflicto territorial que justificara la intervención militar de Estados Unidos contra territorio venezolano.
Con el Mazo Dando