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Hace 16 años, los electores venezolanos participaron en las megaelecciones convocadas tras la promulgación -a fines de 1999- de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. En dicho proceso, el pueblo ratificó al comandante Hugo Chávez como presidente de la República para el periodo 2001-2007.
«El 30 de julio del año 2000, nuestro Comandante Chávez escribiría otra gran, importante e imborrable página para la historia democrática y participativa de nuestra Patria al relegitimar los poderes», indicó el presidente de la República, Nicolás Maduro, al rememorar la fecha.
En la red social Facebook, el mandatario venezolano recordó que 59,8 % de los votantes registrados en esa elección, equivalente a 3.757.773 electores, reafirmó la voluntad popular de tener a Chávez como presidente, «consolidándose como líder del pueblo venezolano en el siglo XXI».
Con las megaelecciones, se cierra el proceso que permitió el nacimiento de un nuevo marco constitucional y que tuvo como primer paso la aprobación del referendo constituyente, el 25 de abril de 1999; la elección de los integrantes de la Asamblea Nacional Constituyente, el 25 de julio de ese año; y la aprobación de la Carta Magna, el 15 de diciembre siguiente.
El 30 de julio de 2000, también fueron electos los diputados de la Asamblea Nacional, que pasaba de dos cámara a una; gobernadores, alcaldes, integrantes de consejos legislativos y concejos municipales, como parte de la refundación de la República.
En dicho proceso, «el pueblo nuestro, la participación del pueblo ha sido extraordinaria, lo cual indica que en verdad la nueva República está naciendo con un grado aceptable, todavía no óptimo, pero aceptable, fuerte, de legitimidad. Una democracia sin la participación de un pueblo no es democracia. Así teníamos antes, unos sistemas democráticos totalmente huecos, donde la mayoría de la población no participaba, no sentía. Ahora tenemos un pueblo que siente, que ama, que sufre, que llora, que aplaude, que clama, que impulsa estos procesos, y eso es muy positivo para la Venezuela nueva», decía el líder socialista el 4 de agosto de 2000, cuando fue proclamado como presidente electo por el Consejo Nacional Electoral.
Ese día, indicó que con el proceso constituyente se avanzó hacia la construcción de una estructura de Estado mucho más robusta frente a la que existía en 1998, cuando fue electo por primera vez presidente. Por ello, llamó a los nuevos diputados, gobernadores, alcaldes y al pueblo a la unión dentro de la diversidad para emprender las transformaciones que demandaba la nación en aquel entonces.
«Invoco los principios necesarios de la objetividad, de la crítica racional, a todos. Invoco la prudencia, invoco la paciencia y la tolerancia de todos, invoco el amor a la patria, invoco la esperanza y lo mejor que podamos tener los venezolanos para dedicarnos de ahora en adelante a la reconstrucción social y económica de Venezuela, que es la esencia de la revolución», expresó el líder socialista.
La elección del 30 de diciembre se suma a la cadena de triunfos que el pueblo venezolano obtuvo junto a Chávez, líder fundamental del movimiento progresista que suma 18 victorias en 20 elecciones celebradas en 17 años.
AVN