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6.Jun.2016 / 09:02 am / Haga un comentario

Foto: Ciudad CCS

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Con plena anuencia de la derecha nacional, desde el eje imperial, a través de la Organización de Estados Americanos (OEA) y su vocero Luis Almagro, pretendieron convocar nuevas acciones para desestabilizar al gobierno legítimo de Venezuela, justo cuando se ha visto en el mundo un intento de diálogo y apoyo a nuestro país por parte de Unasur, de los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá), y cuando las políticas internas de la agenda económica han comenzado a dar algunas señales de recuperación sostenida.

Así se expresó la analista internacional Laila Tajeldine, quien agregó que “debemos sumar otro factor de mejoría nacional que alentó las intenciones injerencistas y desestabilizadoras, como es la lenta pero sostenida recuperación que ha mostrado el precio del petróleo, sobre todo ahora que hay perspectivas de acuerdos mayoritarios para la estabilización, logrados básicamente por las gestiones del Gobierno Bolivariano”.

Indicó que “se ve como una desesperación opositora y del imperio en acelerar mecanismos que traten de debilitar y derrocar a Maduro, porque Venezuela es un objetivo muy apetecible desde lo geopolítico, por sus riquezas y por su influencia en el resto del subcontinente en cuanto a pensar distinto al orden hegemónico mundial y tratar de no ser más el patio trasero de Estados Unidos”.

Asegura que el argumento de la supuesta crisis humanitaria en el país no tiene asidero ni rigurosidad científica que la compruebe, lo que debilita en sí misma la intención injerencista.

Agregó la analista que la derecha aceleró sus ataques a través de la OEA, esperando luz verde para la aplicación de la Carta Democrática, porque para el mundo económico mayo era un hito en el que esperaban colapsara el país, pero ante la resistencia del pueblo digno y las políticas nacionales respaldadas con la agenda económica, no se aguantaron y fallaron en su voraz ataque”.

Evidentemente hace referencia al surgimiento del nuevo modelo económico nacional, debido al fin del modelo rentista, por lo que el pueblo organizado en el marco de la agenda económica, se ha dado formas efectivas de distribución de alimentos e incentivos a la producción de lo que se consume con el fortalecimiento de los CLAP.

“Toda esa organización popular y sus paulatinos resultados, dieron en el clavo y volvieron más loca a la oposición. Los hicieron activarse desesperadamente y por eso siguen fracasando en sus intentos de llegar como sea al poder. Y aunque volvieron a fallar nadie se puede confiar”, insistió.

Considera que “el imperio no descansará en sus intentos de lograr su objetivo intervencionista; por ello no podemos descansar en la lucha por nuestra absoluta independencia. Esta reciente decisión donde Venezuela salió airosa no es más que un ensayo, una medición de fuerzas, ya sabemos de lo que Estados Unidos es capaz”.

Acotó que aunque escapa de la OEA, hay una inocultable relación en este caso y lo que persigue el imperio y sus aliados del Grupo de los 7 (G-7): “Los 7 jinetes del apocalipsis, que son Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, lo que busca es el control de territorios y sus recursos a través del manejo de sus hilos políticos; y sería inocente pensar que Venezuela no deja de ser uno de sus objetivos”.

Se muestra convencida de que en la próxima reunión de la OEA no se tratará el tema de la aplicación de la carta democrática a Venezuela como pretendían Almagro y la oposición nacional, “porque esa estrategia ya fue desestimada, incluso por el propio mandato interno del organismo porque en sus artículos 18, 19 y 20 especifican que no pueden tomar decisiones de orden injerencista ni impositiva sobre ninguno de sus Estados miembros, ya que se estaría trastocando el derecho internacional y el derecho soberano de los países de elegir y decidir sus destinos organizativos, económicos, sociales y políticos”.

OEA inmoral

“En el cumplimiento de sus deberes, el secretario general y el personal de la Secretaría no solicitarán ni recibirán instrucciones de ningún Gobierno ni de ninguna autoridad ajena a la Organización, y se abstendrán de actuar en forma alguna que sea incompatible con su condición de funcionarios internacionales responsables únicamente ante la Organización”, reza el artículo 118 de la Carta de la OEA, por tanto las instrucciones dadas por la derecha y Estados Unidos a Luis Almagro, están cargadas de intenciones violatorias del principio de funcionamiento de la propia organización, lo que expone al secretario general a ser destituido según indica la letra del 111.

Agrega la analista que “eso indica el carácter de ilegalidad e inmoralidad con que actúa solo por desestabilizar a un país que no les hace el juego”.

En ese orden de ideas, Tajeldine enumera una serie de países y situaciones donde la OEA debió actuar y no lo hizo, incluyendo el Caracazo, las guarimbas y La Salida, con sus respectivas víctimas.

Se pregunta, “por qué no se pronuncian, por ejemplo, con respecto al bloqueo de Cuba ni hablaron ni hablan de los muertos y desaparecidos de otros países del continente ni de la propia Venezuela durante la Cuarta República. Tienen doble moral”.

Asevera la estudiosa del tema internacional que “históricamente la OEA ha sido un instrumento para afianzar más el poder del imperio, por ello apoyan que nos quieran aplicar a nosotros es ese mismo bloqueo que a Cuba solo por el prurito que sienten ante nuestro derecho de ser libres y soberanos”.

Estructura podrida

En ese sentido hizo un reconocimiento al pensamiento visionario de Hugo Chávez quien indicó que “la OEA no sirve para nada. Debe desaparecer”, recordó Tajeldine, quien luego de un breve análisis de la reciente historia del continente espetó: “La OEA tiene una estructura podrida, por eso hay que debilitarla y eliminarla si es posible, porque en nada responde a los intereses de la región. En vez de proponer y defender la paz y la no violencia, lo que hace es propiciar crisis para callar voces propias y soberanas de los pueblos que buscan su autodeterminación”.

Por ello considera un acierto de la diplomacia venezolana haber fortalecido nexos de respeto bilateral con organismos como ALBA, Unasur, Petrocaribe o la Celac, porque es una forma de hacer contrapeso ante la presión de la OEA y otros mecanismos de supuesta cooperación internacional que siempre han rendido culto a la hegemonía imperial.

Lamentó la posición entreguista de Paraguay, que pasó de ser mediador a tomar parte en contra de la soberanía venezolana.

Culminó reafirmando que tal como lo determinó en pleno la OEA en sus recomendaciones, el Gobierno Nacional debe seguir insistiendo, como siempre, en el diálogo, para evitar ser llevados a un túnel sin salida, como lo ha logrado Estados Unidos en países de este y otro continente, para luego justificar su intervención militar”, e hizo un llamado a la oposición a que se sensibilice más con los intereses comunes de la Patria.

Almagro violó artículos de la Carta

1 Artículo 18. El respeto y la fiel observancia de los tratados constituyen normas para el desarrollo de las relaciones pacíficas entre los Estados. Los tratados y acuerdos internacionales deben ser públicos.

2 Artículo 19. Ningún Estado o grupo de Estados tiene derecho de intervenir, directa o indirectamente, y sea cual fuere el motivo, en los asuntos internos o externos de cualquier otro. El principio anterior excluye no solamente la Fuerza Armada, sino también cualquier otra forma de injerencia o de tendencia atentatoria de la personalidad del Estado, de los elementos políticos, económicos y culturales que lo constituyen.

3 Artículo 20. Ningún Estado podrá aplicar o estimular medidas coercitivas de carácter económico y político para forzar la voluntad soberana de otro Estado y obtener de éste ventajas de cualquier naturaleza.

Ciudad CCS

 

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