Noticias / Memorias
El 8 de enero de 1980, bajo el gobierno del presidente Luis Herrera Campins, se produjo un nuevo decreto sobre regionalización, mediante el cual se crean nueve regiones administrativas, quedando divididas como:
Región Capital: Distrito Federal y Estado Miranda
Región Central: Aragua, Carabobo y Cojedes; Región de los Llanos: Guárico y Apure (excepto el entonces Distrito Páez)
Región Centro-Occidental: Falcón, Lara, Portuguesa y Yaracuy; Región Zuliana: Zulia; Región de los Andes: Barinas, Mérida, Táchira, Trujillo y Distrito Páez del estado Apure
Región Nor-Oriental: Anzoátegui, Monagas y Sucre
Región Insular: Nueva Esparta y Dependencias Federales
Región de Guayana: Bolívar, Delta Amacuro y Amazonas
Este decreto derogó los anteriores de 1969 (Nº 72) y de 1972 (Nº 929).
La experiencia venezolana en materia de planificación del desarrollo y ordenación del territorio pasó por una etapa exitosa con la definición de Regiones con fines de planificación del desarrollo, a las que se les dotó de mecanismos institucionales fuertes como fueron las Corporaciones Regionales de Desarrollo. Sin embargo, al establecerse la elección popular de gobernadores y alcaldes, no se previó el nuevo papel que tendrían estas Corporaciones en este nuevo federalismo, y terminaron por desaparecer. Habrían podido ser aprovechadas para dotar a los gobiernos estadales y municipales de entes técnicos de gran calidad para apoyar sus políticas y estrategias de desarrollo.
Con el Mazo Dando