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Foto: Archivo
Al reactivarse los canales de diálogo entre Venezuela y Estados Unidos, concretados esta semana, la derecha venezolana quedó fuera de balance en todos sus sectores, esos que mantienen una campaña internacional para desprestigiar al gobierno del presidente Nicolás Maduro y justificar así una intervención extranjera, indicó el periodista José Vicente Rangel, en su programa de este domingo.
La reunión de la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, así como la designación de Thomas Shannon como contacto para el diálogo, “es sin duda un paso de gran importancia. La oposición, que no se aparta del esquema que consiste en estimular reacciones negativas de la Casa Blanca contra Venezuela, fue sorprendida con lo sucedido y quedó prácticamente fuera de balance, haciendo conjeturas acerca de lo que pasa”, expresó Rangel.
En dicho espacio, indicó que los grupos políticos que coexisten en la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática(MUD), promotora de la aplicación de la Carta Democrática Interamericana, no midió el impacto de esta propuesta, que es vista con desagrado en la región, así como la postura de Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americano (OEA), “que algunos consideran se inspira en intereses crematísticos”.
La posición de Almagro, que se plegó “a la presión de EEUU y se convirtió en vocero de la oposición, incluso en los aspectos más absurdos”, contrasta con la postura de Ernesto Samper, secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas, quien ” se ha manejado con extrema habilidad y ha ganado confianza en la región”.
Samper ha colaborado en la promoción del diálogo entre el Gobierno venezolano y factores de oposición, acercamiento que ha tenido como mediadores a los expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, de España; Leonel Fernández, de República Dominicana, y Martín Torrijos, de Panamá.
Su elección, agregó Rangel, fue acertada porque “han dado un aporte de prudencia y seriedad a las labores que cumplen”, una actitud que ha sido reconocida por aquellos factores que a lo interno de la oposición admiten la necesidad de dialogar.
Con el Mazo Dando