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Columna Debate
Por: Francisco Rangel Gómez
Cuánto perdemos todos con la desestabilización que pretende instaurar la ultraderecha que no cree en votos ni en Política, que pretende «salir de Maduro» aunque eso implique instaurar una espiral sin retorno de violencia, vandalismo, muerte y destrucción. Han perdido casi dos décadas intentando a través de guiones golpistas recuperar el poder; todavía esperamos las y los venezolanos escuchar de algún «líder» de la oposición la propuesta para mejorar o cambiar lo que a ellos tanto les molesta de este proceso revolucionario.
Alguna idea que los convenza a ellos mismos en primer lugar, que convenza a su militancia que bastante golpeada tiene la moral a costa de creer en todas las promesas incumplidas de una oposición que no termina de enseriarse y de entender que el Pueblo Venezolano cambió y que ya no somos los de la democracia representativa sino protagónica y que eso implica trabajar con un poder popular desconocido para ellos, con organizaciones como los consejos comunales que no solo guardan la esperanza de un cambio en su barrio, sino que son los hacedores directos de ese cambio.
Señores de la ultraderecha, no somos el mismo Pueblo que ustedes gobernaron hace algunos años, hemos evolucionado y seguiremos haciéndolo en beneficio de nuestra Patria, a la que ustedes mantuvieron MONOPRODUCTORA (que no se les olvide esa tamaña responsabilidad cuyas consecuencias tratamos de resarcir con mucho trabajo), a la que ustedes mal administraron e incluso PRIVATIZARON, a pesar del petróleo la hicieron «de pocos» dejando al Pueblo, a la mayoría de las venezolanas y los venezolanos desasistidos completamente.
Nos correspondió como Gobierno darle la cara a miles de problemas heredados de su mala república, reivindicar tantos hechos de lesa humanidad como niños con hambre o sin derecho a la educación. Y a pesar de todas las trancas impuestas por ustedes desde 1999, hemos salido adelante porque haber reivindicado al Pueblo Venezolano obtuvo un reconocimiento por parte de una militancia de millones que la semana pasada llenó las calles de Caracas una vez más en una demostración de fuerza que debería haberles dado un escarmiento.
Sí, seguimos en la calle pero no para destruir, como lo han hecho ustedes sin remilgos ni arrepentimientos, sino trabajando por la Patria que también es de sus hijos e hijas. Así fue como en la Fundación Armonía, una obra de calidad que atiende a los abuelos y abuelas también reivindicados en revolución y que ustedes tanto vejaron con irrisorias pensiones; llevamos a cabo la segunda plenaria del Consejo Estadal de Economía Productiva, donde discutimos proyectos productivos junto al sector privado y asumimos compromisos trascendentales que estamos seguros beneficiarán nuestro desarrollo socioeconómico.
Precisamente estamos concentrados en darle al país alternativas económicas desde un estado Bolívar lleno de infinitas potencialidades agroproductivas, metalmecánicas, turísticas, desde allí surgen las buenas ideas en el trabajo conjunto entre sectores que dejaron de lado las tendencias políticas para abocarnos al propósito de salir del momento coyuntural que es responsabilidad de TODOS.
No perdemos las esperanzas en que al grupo de la derecha extrema, les llegue el Patriotismo al corazón y se despierten un día con ganas de trabajar y dejar de perder el tiempo en guarimbas que destruyen nuestras ciudades, causan terrorismo y lejos de solucionar algún problema, nos suman demasiados. Seguimos con la mano extendida para estrecharla con quienes verdaderamente quieran sumarse al equipo que ama y trabaja por Venezuela.
Viviremos y venceremos
@rangelgomez