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En materia parlamentaria, la situación de Venezuela es particular, debido a la polarización propiciada por la derecha desde las elecciones presidenciales de 1998, cuando los partidos opositores decidieron retirar a todos sus candidatos y postular a Henrique Salas Römer como único contendiente para confrontar la fuerza revolucionaria del comandante Hugo Chávez.

Desde ese entonces, las pugnas entre la revolución y la derecha neoliberal han dominado el escenario político. Una  disputa entre intereses económicos capitalistas y la lucha por los derechos del pueblo, que ha sido evidente en el Hemiciclo de la Asamblea Nacional (AN).

Actualmente, tras las elecciones del pasado 6 de diciembre, 163 diputados —hay cuatro curules por definir—, distribuidos en 18 organizaciones políticas, integran la AN que regirá durante el periodo 2016-2021.

El Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) es la primera fuerza política del actual Parlamento. Después sumar 92,57% de los casi cinco millones y medio de votos obtenidos por el Gran Polo Patriótico (GPP), obtuvo 51 de los 54 escaños del bloque revolucionario dentro del órgano unicameral, lo que representa 31,28% del total de diputados.Los otros tres curules del chavismo corresponden dos al Partido Comunista de Venezuela (PCV) y uno a Vanguardia Bicentenaria Republicana (VBR).

En el caso de los partidos opositores resulta complejo saber cuál obtuvo más votos, debido a que las cúpulas de esas organizaciones pactaron participar en la cita electoral con una tarjeta única. Sin embargo, en cuanto a número de diputados el partido de derecha con mayor número de legisladores es Primero Justicia (PJ) con 34, lo que representa 20,8% del total, es decir un 10,43% menos que el Psuv.

Acción Democrática (AD), segundo partido opositor con más diputados, se quedó con 15,9%, que equivale a 26 legisladores; mientras que Un Nuevo Tiempo (UNT) tiene 18 diputados (11%), seguido de Voluntad Popular con 14 (8,5%).

El resto de los escaños están ocupados por dirigentes de La Causa R, que logró cuatro diputados; con dos legisladores quedaron Avanzada Progresista, Cuentas Claras, Movimiento Progresista de Venezuela (MPV), Gente Emergente y Parlinve, y con un parlamentario Proyecto Venezuela, Vente Venezuela y Alianza Bravo Pueblo (ABP).

El resultado obtenido por el Psuv dentro de la Asamblea es significativamente alto, especialmente si se compara con casos como las elecciones generales realizadas el 20 de diciembre de 2015 en España, donde el Partido Popular ganó los comicios y alcanzó sólo el 28,72% de los curules y su contendiente más cercano, el Partido Socialista Obrero Español, el 22,01%.

Entre dirigentes populares y empresarios

Las causas e intereses en la nueva Asamblea Nacional, instalada el pasado 5 de enero, se refleja en quiénes conforman cada una de las organizaciones políticas.

La bancada revolucionaria cuenta entre sus filas con un representante del poder comunal, Christopher Constant, y dos líderes campesinos, Domingo Santana y Héctor Orlando Zambrano, quienes han dedicado su vida política a la defensa y protección de sectores sociales históricamente marginados, y a la lucha por alcanzar sus justas reivindicaciones.

En los partidos de derecha no destaca algún defensor de los excluidos, mientras que casi el 20% de sus diputados son empresarios o están vinculados a este sector.

Entre los opositores figura, por ejemplo, Antonio Barreto Sira, exalcalde del municipio Freites del estado Anzoátegui, quien fue señalado por el Consejo Legislativo de la entidad por acumular una gran fortuna personal y haberse hecho acreedor de propiedades dentro y fuera de Venezuela, a través del desfalco de las comunidades que residen en esta localidad, gracias a compañías anónimas de servicios de transporte bajo su poder.

Por su parte, el diputado Omar Barboza, gobernador del estado Zulia entre 1985 y 1989 designado por el presidente adeco Jaime Lusinchi, es conocido por sus vínculos con grupos empresariales del sector ganadero de la Costa Oriental del Lago. También Amerigo De Grazia, Mariela Magallanes, Juan Miguel Mateus, Luis Carlos Padilla, Alexis Paparoni e Ydilio Abreu están asociados a intereses empresariales.

En general, una característica de las diversas fracciones opositoras en la AN es contar con voceros y defensores de la visión económica neoliberal.

Abogados e ingenieros son mayoría

De los 163 parlamentarios que integran la actual Asamblea Nacional, 45 son abogados. El derecho es la profesión más predominante dentro del hemiciclo, seguida de la ingeniería (21 diputados), y la docencia (15).

Otras profesiones recurrentes en la AN son: Administración (12), Comunicación Social (9), Economía (7) y Ciencias Políticas (6).

Entre las ocupaciones menos predominantes se encuentran: veterinarios, farmaceutas, cantantes, internacionalistas, urbanistas, geólogos, artistas plásticos, licenciados en letras, sindicalistas, técnicos en mecánica, especialistas en gerencia educacional y exdeportistas.

Cuatro de los parlamentarios opositores aún se encuentran en condición de estudiantes de pregrado: Miguel Pizarro (28 años), Gaby Arellano (32 años), Juan Requesens (27 años) y Stalin González (36 años), sobre éste último una nota publicada en su página web en marzo de 2015 refiere que le faltaban cuatro materias para graduarse en Derecho.

Dos de ellos (Arellano y Requesens) fueron activistas de las guarimbas ocurridas en 2014, que dejaron saldo de 43 fallecidos y más 800 heridos. Mientras que González apoyó las acciones violentas realizadas en 2007 después de que no se renovara la concesión a RCTV.

En la bancada del Psuv sólo figura un estudiante de pregrado: Jorge Pérez, quien con 22 años de edad se convirtió en el diputado más joven de la historia venezolana. Ha sido promotor del Movimiento por la Paz y por Vida en el estado Cojedes y estudia sexto semestre de Comunicación Social en la Universidad Bolivariana de Venezuela.

Trayectoria revolucionaria y experiencia neoliberal

Del total de diputados que conforman el Bloque de la Patria, 42 han ejercido funciones en organismo del Estado o en la administración pública regional, especialmente desde la llegada de la Revolución Bolivariana al poder con el triunfo del comandante Hugo Chávez.

Entre ellos ocho han sido ministros: Héctor Rodríguez, Carmen Meléndez, Diosdado Cabello, Ricardo Molina, Asdrúbal Chávez, Víctor Clark, Haiman El Troudi y Elías Jaua.

Por su parte, las fracciones opositoras cuenta entre sus filas con 65 diputados que han formado parte del Poder Ejecutivo o de gobernaciones y alcaldías.

De esta bancada opositora, 20 legisladores ostentaron uno o varios cargos públicos durante la IV República (1958-1998). Tal es el caso de Williams Dávila, quien fue viceministro de Relaciones Interiores y Gobernador de Mérida durante el gobierno de Lusinchi, en la época que ocurrieron las Masacres del Amparo (29 de octubre de 1988), y de Yumare (8 de mayo de 1986) y fue, además, senador del extinto Congreso de la Nación durante la segunda presidencia del copeyano Rafael Caldera.

Dentro de este grupo también destaca el actual presidente del Hemiciclo, Henry Ramos Allup, exsenador y diputado del antiguo Congreso, quien apoyó la suspensión de garantías constitucionales durante la IV República y defendió el paquete económico neoliberal del Fondo Monetario Internacional, aplicado por Carlos Andrés Pérez en 1989, el cual produjo la rebelión social conocida como El Caracazo.

Además varios de los diputados de derecha, entre ellos Julio Borges y el propio Dávila, apoyaron y/o participaron del Golpe de Estado de abril de 2002 en contra del presidente Chávez.