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ABN.- Salsa cabilla bien tocada. Eso es lo que salía a borbotones del Combo Bolivariano, este 04 de febrero de 2010, a dieciocho años del comienzo de todo este montón de cambios que llamamos Revolución Bolivariana.
La del Combo… no era una orquestica cualquiera, sino un bandón con trompeta, saxo alto, trombón, flauta y toda la percusión que pueda sonar en una buena rumba latina, incluyendo un joven timbalero con franela de los Leones del Caracas, que se afincaba con fuerza en las pailas. Su vestimenta contrastaba entre tanta franela roja.
Todo sucedía al final de la avenida principal de Santa Mónica, 20 metros antes de la Procuraduría General de la República, donde, sobre una tarima, un "vente-tú" de magníficos músicos soltaban todo lo sabroso que tenían en el alma.
Casi al mediodía, le dedicaron una canción a los medios de comunicación de la derecha, sobre todo a Globovisión. Un clásico de la salsa que muchos conocimos a través de Ray Barreto y Adalberto Santiago, pero esta vez en versión rojita. "Quítate la máscara, quítate la máscara, bandolero".
Luego vinieron composiciones propias, como esa donde el coro anuncia:
"Genio Chávez apareció, y salió de la botella.
Creció y se multiplicó…
y ahora no hay quien lo detenga".
En el oleaje de gorras rojas destacaba una pareja que bailaba bien apretado, como se baila salsa de verdad. Sólo después de gozar un mundo sacudiéndose con una morenaza de cintura pequeñita y sincero escote, fue cuando pudimos conocer a Humberto Olmos, supervisor de mantenimiento de la Universidad Bolivariana.
Humberto está claro. Nadie le dijo que fuera a la marcha. Fue porque cree en Chávez y ya. Pero no hay medias tintas. "Hay que denunciar, hay que rectificar. Si hay corruptos, hay que denunciarlos y reconocer los errores. Si no, nos exponemos a que la justicia sea de un solo lado, el de los pendejos".
Humberto hace una pausa para ver pasar el grupo de los Patrulleros del PSUV del Aeropuerto de Maiquetía, en el que una señora tiene una franela que dice "Los 4 Fantásticos de la Revolución", con fotos de Bolívar, Chávez, el Che y Fidel.
Luego Olmos prosiguió su reflexión: "No solamente hay que castigar a quienes roban sino a quienes abusan de las libertades. Yo creo que la mejor arma que tiene la oposición es la libertad de expresión y no sabe usarla. No se trata de decir lo que le dé a gana, sino de decir la verdad. Si usted denuncia y tiene pruebas, todos, chavistas y no chavistas vamos a apoyarlo. Pero no hable gamelote. Aquí se ha sido muy permisivo. Al astrólogo que predijo que Caldera se iba a morir lo pusieron preso durante la Cuarta República. Aquí hemos soportado de todo. Hay que poner orden. El que no se responsabilice por lo que dice, que se j…"
Humberto deja de hablar unos minutos para ver pasar el grupo de los Trabajadores Postales, que vienen acompañados de un doble de Fidel Castro, que se fotografía con muchas admiradoras. Más atrás viene el Frente de Misiones Socialistas, con una dama que exhibe una máscara del presidente Chávez con verruga y todo. Humberto Olmos decide entonces ponerse un poco más serio en medio de la fiesta.
"Como pueblo despertamos y una vez que lo logramos, nadie va a quitarnos lo que nos pertenece. Chávez nos ha dado sentimiento de pertenencia, de lo que de verdad nos pertenece como pueblo. Ha habido errores, sí. Pero la intención ha sido buena".
Ya no es posible retener a Humberto en esa esquina. Desde la tarima donde descarga el Combo Bolivariano se anuncia que "el Comandante está cerca y hay que avanzar hacia Fuerte Tiuna".
La banda de salsa roja se despide cantando: "Uh-Ah, Chávez no se va, ni con firmas chimbas ni con guarimbas, Chávez no se va".
Humberto ya está perdido en la multitud.