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Prensa PSUV.- La campaña por la enmienda constitucional se intensifica en Venezuela, a sólo 3 semanas para el enfrentamiento electoral del bloque del Sí, con mayoría evidente y la otra opción que se mantiene gracias a la manipulación de estudiantes universitarios de instituciones privadas.
El referéndum, que se efectuará el 15 de febrero, propone la reelección continua en sus cargos del Presidente, diputados, alcaldes, legisladores regionales y gobernadores.
El pueblo venezolano con la marea roja inunda las calles del país en apoyo a Hugo Chávez y a la propuesta de enmienda, a la cual pueden asistir a votar 16 millones 949 mil venezolanos.
Tanto en esta capital como en otras importantes ciudades del país, sectores de grupos estudiantiles opositores protagonizaron el 20 de enero actos violentos que obligaron a las autoridades policiales a intervenir para controlar el orden público.
En esas acciones la Policía Metropolitana de Caracas decomisó un camión con bombas molotov, piedras y garrafas de gasolina, que llevó al arresto de cinco personas, el chofer del camión y cuatro estudiantes, estos últimos puestos en libertad posteriormente.
Chávez manifestó en un acto de juramentación de las misiones sociales que en las últimas horas ha visto a una oposición desesperada, que comenzó el año con el llamado pacto de Puerto Rico y el mensaje traído por los participantes fue muy claro: incendiar Venezuela.
Para el dignatario, estos actos de supuestos movimientos estudiantiles, financiados y apoyados por Estados Unidos, tienen por objetivo buscar heridos y sangre para hacer parecer que Venezuela es un estado represivo.
La víspera, unos 25 mil integrantes de sectores laborales públicos y privados del Frente de Trabajadores por la Enmienda marcharon con atuendos rojos, color del Partido Socialista Unido de Venezuela, para celebrar los 51 años del derrocamiento del dictador Marcos Pérez Jiménez y en apoyo al Sí.
Los opositores también convocaron a una marcha, de poca concurrencia según imágenes televisivas emitidas por el canales Venezolana de Televisión y Globovisión, hasta la nueva sede del Consejo Nacional Electoral, en la Plaza Venezuela, que transcurrió en paz luego de la advertencia de las autoridades de no permitir disturbios.
Significativo fue el uso de pancartas y símbolos con colores negros muy similares a los de fascistas en Europa.