Opinión

14.Nov.2023 / 10:51 am / Haga un comentario

Foto: Referencial

Por Freddy Gutiérrez 

¡Saludo para todos (as), mis estimados (as) camaradas! Espero que se encuentren bien, aún alrededor de tanta turbulencia que existe a nivel mundial. Les comento que continuaré con el tema de nuestro continente hermano, África, porque, sigue siendo depredado por potencias europeas, en medio de los cambios geopolíticos que se están dando, a pesar que, desde hace medio siglo, África, les ha pedido que renuncien al dominio sobre su territorio.

Lamentablemente, también se ha visto saqueada por parte de algunos de sus connacionales quienes, enceguecidos por la ambición, solo buscan “pescar en río revuelto” encargándose de comandar operaciones corruptas sobre su propio pueblo, aliándose, sin ética alguna, con las potencias extranjeras opresoras.

Ahora bien, deseo contarles una historia inspiradora, de un revolucionario digno de admirar, un hombre que, ejerció acciones que sacaron a su país de la extrema pobreza en el corto tiempo que pudo gobernar, pero, que también fue vilipendiado, debido a medidas extremas que tomó para poder concretar los sueños de bienestar que tenía para su pueblo. Por ejemplo, leí: “una transformación social de la dimensión lograda solamente podía ser llevada a cabo por un gobierno autoritario”, esto porque llegó a prohibir la prensa privada, ya que, entendía que ésta podía intervenir en sus objetivos torciendo la opinión pública en favor de los intereses extranjeros. Quizás algunos de ustedes ya saben de quien estoy hablando y sí, se trata de: Thomás Sankara. Les contaré de una revolución que levantó el rostro de un pueblo dominado por el imperialismo y la corrupción, como quizás no ha sucedido en otra parte del mundo.
Comencemos con algunos antecedentes.

El país Burkina Faso, antes de ser una república independiente, fue colonia de una potencia europea, llamada: Alto Volta francés, fundada el 1 de marzo de 1919 bajo la Tercera República, formando parte de lo que sería la África Occidental Francesa; la misma sufriría disoluciones y cambios territoriales afectando a los países vecinos, hasta que, una revisión en la Organización de los Territorios Franceses de Ultramar, aplicó La Ley Básica el 23 de julio de 1956, bajo el contexto de comenzar la descolonización del continente africano por parte de las potencias europeas, o al menos, asegurar un alto grado de autogobierno a los territorios individuales. El Alto Volta se convertiría en una república independiente -dentro de la comunidad francesa- el 11 de diciembre de 1958, -el mismo año que se derrocó en Venezuela al dictador Marcos Pérez Jiménez- aunque esto fue varios meses antes, el 23 de enero de 1958. Pero, la independencia del Alto Volta, se haría efectiva dos años después, en 1960, siendo presidida la nación por primera vez por Maurice Yaméogo, líder de la Unión Democrática del Volta, en el mismo año en que se creó la constitución que permitía el sufragio universal para elegir a un presidente y una Asamblea Nacional. Sin embargo, comenzaría el totalitarismo. Tras llegar al poder, Yaméogo, prohibió que otros partidos pudieran postularse, excepto, el suyo, para perpetuarse en el poder un año más de lo que preveía la Constitución, hasta que, en 1966, luego de una serie de disturbios, el Ejército intervino deponiendo a Yaméogo, suspendiendo la Constitución, disolviendo la Asamblea Nacional y colocando en el gobierno al lugarteniente coronel: Sangoulé Lamizana. El ejército permaneció en el poder durante cuatro años hasta 1960, cuando se ratificó una nueva Constitución que, además, redujo el periodo electivo de cinco a cuatro años.

Lamizana se mantuvo en el poder hasta 1977, cuando se redactó una nueva Constitución que, a su vez, permitió que fuera reelegido como presidente un año después. Pero nada fue “color de rosa”. Este país, aún llamado Alto Volta, tuvo que cargar con los problemas de una joven nueva República africana o colonialista, teniendo Lamizana que enfrentar a las poderosísimas uniones comerciales establecidas en el territorio desde los tiempos coloniales, derivando en un nuevo Golpe de Estado el 25 de noviembre de 1980, dado por el coronel Saye Zerbo, quien estableció el Comité Militar de Recuperación por el Progreso Nacional como suprema autoridad gubernamental, eliminando esa Constitución de 1977.

¡Y se repitió la historia! Porque el coronel Zerbo tampoco logró pactar con las uniones comerciales establecidas siendo derrocado dos años después, el 7 de noviembre de 1982, por el mayor Jean-Baptiste Ouédraogo y el Consejo de Salvación Popular (CSP). El líder más radical de ese consejo fue el joven Thomas Sankara (1949-1987), quien, sería nombrado también Primer Ministro en enero de 1983.

Según leí, las políticas de izquierdas llevadas adelante por Sankara, incomodaban a ciertos grupos del ejército, así que lo arrestaron -situación mal vista por el pueblo- y terminó con su liberación a manos de quien sería años después, su asesino: Blaise Compaoré (un militar burkinés, dictador de Burkina Faso desde el 15 de octubre de 1987 hasta el 31 de octubre de 2014, que llegó al poder mediante un Golpe de Estado).

Cuando Sankara tomó el poder, también mediante un Golpe de Estado del 04 de agosto de 1983, tenía 33 años, pero, llegó ahí contando con un amplio apoyo de la población, que esperaban que este joven líder fuera capaz de erradicar a la corrupción y sacar al imperialismo de su país. De esta manera, Sankara puso manos a la obra activando el plan de cambio social y económico más ambicioso que haya visto implementado el Continente Africano. Incluso cambió el nombre al país de Alto Volta (nombre francés) a Burkina Faso que significa en un dialecto local: el país de los hombres íntegros. Inspiró en mí el nombre de este artículo.

Este emblemático líder, Sankara, entendió que todos los problemas estructurales de su sociedad se debían a los resquicios del imperialismo, por lo que, la base estructural de su gobierno consistió en lograr la mayor independencia posible, en otras palabras: evitar contar con ayuda exterior (mientras menos se le deba a los dañinos poderes extranjeros, menos influencia tendrían dentro del territorio). Así que, comenzó implementando una reforma agraria (nacionalizando todos los territorios rurales para evitar más hambrunas), enfrentándose incluso a los terratenientes que todavía imponían un sistema feudal sobre los campesinos (esclavizándoles y exigiéndoles tributos), redistribuyó esas tierras entre el campesinado, suspendiendo los impuestos rurales y la renta nacional sobre estas tierras.

Por demás, dispuso un Plan Nacional de Alfabetización, principalmente para apoyar a la población humilde y así como, un Plan de Salud Pública: vacunó a 2,5 millones de niños contra meningitis, fiebre amarilla y sarampión, (enfermedades que azotaban a los niños en Burkina Faso). Reforestó gran parte del territorio para evitar la desertificación definitiva del SAHEL (desierto del Sahara). Además, durante su gobierno, las mujeres tuvieron un papel protagónico dentro del Estado, en el mundo laboral y escolar; se comprometió con los derechos de la mujer, prohibiendo la mutilación genital femenina, los matrimonios forzados y la poligamia. Por ello es que, se decía, que una transformación social semejante sólo podía ser llevada a cabo por un gobierno autoritario, obviamente había gente a la que esto no le iba a agradar mucho.

¡Verán porque se los digo! Uno de los cambios más recordados del gobierno de Sankara, fue su trato hacia la corrupción y aquellas personas que querían sacar una tajada del Estado para así financiar sus lujos. Por ejemplo, vendió la flota de Mercedes Benz del gobierno e hizo que el modesto Renault 5 fuera el auto oficial de todos los ministros. Prohibió el uso de choferes en el gobierno, los billetes de primera clase en avión y redujo los sueldos de todos los funcionarios públicos (incluso el de él, a solo 450 dólares estadounidenses al mes) limitando sus posesiones materiales a: un auto, cuatro bicicletas, tres guitarras, un frigorífico y la casa donde vivía con su familia. Debido a su actitud intrépida y por la admiración que tenía para con la Revolución Cubana de Fidel Castro, se ganó el título del “Che Guevara Africano”. De hecho, creó un comité de defensa de la Revolución igual que hicieron los cubanos.

Esos programas denominados como autosuficientes, marcaron un antecedente revolucionario en las economías de África y también presentarían una alternativa a las políticas económicas extractivas impuestas por las potencias en los procesos de descolonización o poscolonialismo africano. Por esto y más, fue que Sankara se volvió un símbolo para los pobres de África, hasta el día de hoy.

En yuxtaposición, algunos autores señalaron que sus políticas, no fueron del agrado de todos porque también irrumpió contra una pequeña clase media que habitaba en Burkina Faso. Además que, su afán por intentar evitar el restablecimiento de los capitales franceses, terminaron acabando las relaciones comerciales con su vecino y aliado Costa de Marfil, quizás causa de que esta historia tuviera un final tan trágico y por demás injusto.

El 15 de octubre de 1987, Thomas Sankara, fue derrocado por la misma persona que lo llevó al lugar en donde estaba, Blaise Compaoré, contando con el apoyo del gobierno francés de Francois Mitterrand (1916-1996). Además, le fusilaron junto a otros 12 oficiales de su gobierno, enterraron su cuerpo en una tumba anónima y con el agravante de que su familia tuvo que huir del país, para preservar su vida. Sankara tenía tan solo 37 años.

En consecuencia, luego de asumir el poder Compaoré, fueron reveladas sus verdaderas intenciones tras semejante agresión: revocó de forma inmediata todas las nacionalizaciones, abolió casi todas las reformas llevadas a cabo por Sankara y por último, regresó al país la influencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) y los capitales extranjeros; gobernó hasta 2014 y luego también fue depuesto violentamente por una revuelta civil. Hasta el sol de hoy, Francia, sigue teniendo el control sobre la moneda y los flujos económicos en los países africanos de la franja del Sahel (región que separa el desierto del Sahara de la Sabana Africana) y mientras le tenga bajo su dominio, también controlará su comercio. Razones más que suficientes de que exista el sentimiento anti-francés por parte de sus excolonias.
Por añadidura, les cuento que, en un video que conseguí, con fecha de abril 2022, se exponía que Blaise Compaoré, y su ex jefe de seguridad, Gilbert Diendéré, junto con Hyacinthe Kafando (un militar prófugo) habían sido condenados a cadena perpetua por el asesinato del exjefe de Estado que fue convertido en símbolo revolucionario: Thomas Sankara; sin embargo, de los tres sentenciados, sólo Diendéré estuvo presente en la audiencia, puesto que, desde su caída en el año 2014, Compaoré (el principal acusado), vive tranquilamente exiliado en Costa de Marfil.

Pero les digo algo, hoy por hoy, es diametralmente importante pensar en cómo serás recordado cuando dejes este mundo: como unas miserables ratas dañinas que huyen de la justicia (con el respeto que esos animalitos se merecen) o… como quienes, a pesar de su partida física, continúan esparciendo su legado más allá de límites de las fronteras, (a otros continentes incluso) pues de eso se trata la vida, de dejar ¡un legado permanente!

Y justamente, como enviado por la divinidad, me topé con una noticia titulada: «Los problemas de América Latina y África son comunes» donde nuestro comandante Hugo Chávez “recordaba las palabras que, el 4 de octubre de 1984 pronunció en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el popularmente conocido Che Guevara Negro, el gran líder de la revolución de Burkina Faso, Thomas Sankara, “quien da en el centro de la diana de nuestro propósito dentro de este mundo que está en transición hacia la multipolaridad”. Este mártir de la revolución africana y mundial, expresó lo siguiente:

Preferimos buscar formas de organización mejor adaptadas a nuestra civilización, rechazando de manera abrupta y definitiva toda suerte de imposiciones externas, para crear condiciones dignas, a la altura de nuestras ambiciones. Acabar con la supervivencia, aflojar las presiones, liberar nuestros campos de un inmovilismo medieval, democratizar nuestra sociedad, despertar los espíritus sobre un universo de responsabilidad colectiva, para atreverse a inventar el futuro. Reconstruir la administración cambiando la imagen del funcionario, sumergir nuestro ejército en el pueblo y recordarle sin cesar que sin formación patriótica, un militar es sólo un criminal en potencia. Ése es nuestro programa político. (Thomas Sankara, 20/09/2009)
Al respecto, nuestro comandante, entonces Presidente de Venezuela, nos dijo cuanto nos parecemos a África:
Bolívar nos conmina a recordar qué nos constituye, qué nos ha hecho hijos de Nuestra América; nos conmina a nunca olvidar que siendo en parte africanos, mestizos que somos, existe una alianza natural que debe robustecerse con decisión en el plano de la práctica. Nuestros problemas son comunes, las causas y sus raíces hacen comunión. Juntos liberamos este continente una vez, lo volveremos a hacer, ya lo estamos haciendo y en el proceso, los pueblos de la vasta África liberarán de nuevo, junto a nosotros, su tierra y su historia. (Hugo Chávez Frías, 20/09/2009)

Para culminar, una semana antes de su muerte, Sankara, se dirigió a la gente y dijo lo que sería su propio epitafio:
“Aunque los revolucionarios como individuos pueden ser asesinados, nunca se podrán matar sus ideas”.

Escudo de Burkina Faso desde 1984 hasta 1991, donde vemos una azada cruzada con un rifle AK-47 (una alusión a la hoz y el martillo) con el lema «Patrie ou la Mort, nous vaincrons» en español: «Patria o Muerte, Venceremos»).
Mientras tanto, el legado de Sankara continuará vivo en el corazón de todos los pobres de África y en el de todo revolucionario que comprende y asume los esfuerzos que implica conseguir cambios positivos, por todos los siglos.
-SÓLO CONOCIENDO LA HISTORIA MUNDIAL, SE CONSOLIDA UNA REVOLUCIÓN-

Escríbanme, que siempre los leo. Un abrazo fraterno para todos (as) camaradas, gracias por leerme,

¡Hasta el próximo artículo!

Freddy J. Gutiérrez González
@freddygutierrezgonzalez

 

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