Hugo Chávez Frías

  • Las Líneas de Chávez: El ALBA y la hora de los hornos

    La Alianza Bolivariana no sólo es una urgencia histórica sino la vía inexorable para hacerle frente a la crisis estructural del capitalismo y, por eso mismo, el instrumento unitario de mayor voluntad política a la hora de actuar en función de la impostergable unidad de Nuestra América.

  • Las líneas de Chávez: El ALBA llega… ¡Y Morazán vigila!

    Del poema Morazán vive, del gran poeta hondureño Roberto Sosa, he querido recordar estos versos, para decir que este 25 de junio hemos visto a Morazán volver, hecho Pueblo: miles y miles de mujeres y hombres como una marejada de dignidad y orgullo patrio, para llevar la luz allí donde las tinieblas quisieron apagar el ALBA en que se ha venido convirtiendo Honduras.

  • Las líneas de Chávez: La artillería del pensamiento

    Sale esta nueva entrega de Las líneas de Chávez cuando estamos conmemorando un nuevo aniversario del asesinato de ese mártir de la dignidad llamado Fabricio Ojeda: 21 de junio de 1966. No fue un suicidio: esa fue la versión que el aparato represivo del puntofijismo quiso hacerle creer al país.

  • Las Líneas de Chávez ¡Como Sucre en Ayacucho!

    Petrocaribe es una de esas nuevas bases, para construirnos de nuevo y levantar cada día más alto las banderas de nuestra dignidad, libertad y grandeza caribeñas. Tres propuestas presentó Venezuela para su consideración y estudio: la primera, relacionada con la soberanía alimentaria de nuestros pueblos.

  • Las líneas de Chávez : La Batalla de San Pedro Sula

    Ya el ALBA no puede ni podrá ser ignorada en lo adelante. La batalla en la OEA para reivindicar a Cuba por la injusticia cometida en 1962 es una nueva batalla que recuerda a Zamora. Hace 150 años exactos, por estos días, estaba en pleno apogeo la Guerra Federal de Ezequiel Zamora.

  • Bolívar y «la Misteriosa Incógnita…»

    Es asombroso el cómo y el cuán hondo hurgó nuestro padre Bolívar en la búsqueda de la esencia revolucionaria. O para decirlo con él y como él, en «el despeje de la misteriosa incógnita del hombre en libertad».

  • Aló, el Sur también existe

    Nuestro Sur, ahora más que nunca, existe y existirá: tal vez sea nuestro homenaje más sincero al poeta el hecho mismo de que la mala nueva de su partida nos sorprendiera precisamente más allá de las pampas, en el corazón de la Patagonia argentina: allá estábamos, avanzando en el fortalecimiento del eje Caracas-Buenos Aires.

  • Madre Santa, Maisanta…

    Día de la Madre. Nos reconocemos en el amor encarnado por las madres venezolanas: somos radicalmente fieles a su amor. Un amor que se ha transfigurado en Patria, en Revolución, en Humanidad. Madre Patria, Madre Revolución, Madre Humanidad, Madre Santa, Maisanta.

  • ¡Cruz de Mayo, Cruz de Cristo!

    Quien no bebe en la fuente de su memoria, corre el riesgo de extraviarse en el laberinto del olvido. Si andamos huérfanos de ella, estamos condenados a emprender la marcha de nuevo cada día, como una pena eterna, al igual que los que adversaban los designios divinos en Grecia.

  • Trinidad y el imperio sin colonias

    Es ahora que Nuestra América se viste de pueblo, eso lo podemos constatar con el nuevo sentido que para los pueblos tienen las palabras «voto» y «constitución». Ya lo decía el gran pensador revolucionario peruano José Carlos Mariátegui en su Carta a los redactores de Claridad… ¡en 1924 y parece escrito ayer!: «Nuestra causa es la gran causa humana.