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A la derecha venezolana luego que se les descubrió su tan acariciado y añorado intento de golpe de Estado, el cual pretendía reimpulsar la espiral de violencia de las llamadas guarimbas del 2014, ahora anda por ahí diciendo que el Gobierno Bolivariano les tiene una persecución a sus dirigentes.
Aunque no es de extrañarse, ya que ellos son expertos en eso de “tira la piedra y esconde la mano”, porque para dárselas de víctimas llámenlos, pero para asumir responsabilidades que ni los vean.
Como Freddy Guevara que anda justificando a los violentos de sus compañeros diciendo que les tienen “ollas montadas”. Sin embargo, no sabemos cuál porque la única olla montada, llena de violencia y hasta de asesinatos selectivos, era la que tenían ellos para el 1S y el 7S, las cuales fueron frenadas gracias a las investigaciones realizadas por los cuerpos de inteligencia del país.
Dejen la farsa porque esas de yo no fui ni sus mamás se las compran.
Con el Mazo Dando