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Foto: Archivo
Este miércoles se desarrolla en la Casa Amarilla, sede de la Cancillería venezolana en Caracas, la reunión de integrantes de los gabinetes de Venezuela y Colombia, para abordar los temas sensibles en una frontera común que abarca 2.119 kilómetros.
Esta cita forma parte de los siete puntos que acordaron los gobiernos de Venezuela, Nicolás Maduro, y Colombia, Juan Manuel Santos, en un encuentro realizado este lunes en Quito, Ecuador, como parte de una hoja de ruta para normalizar las relaciones y resolver los problemas en la frontera común, sobre la base del respeto mutuo y el derecho internacional.
La agenda de siete puntos contempla, además, el retorno de los embajadores, el fortalecimiento del diálogo bilateral, impulsar la progresiva normalización de la frontera, la promoción de una coexistencia armónica entre los modelos económicos, políticos y sociales de cada país, así como un llamado a la hermandad y la unidad.
Ambos gobiernos también se comprometieron a realizar una investigación de la situación de la frontera colombo-venezolana, y continuar con el acompañamiento de las delegaciones de Ecuador y Uruguay, como representantes protémpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), respectivamente.
En la reunión de este miércoles se prevé la asistencia, en representación del Gobierno venezolano, de la canciller Delcy Rodríguez; el vicepresidente del Área Económica, Rodolfo Marco Torres; los ministros de Petróleo y Minería, Eulogio Del Pino; de la Defensa, Vladimir Padrino López, de Comercio, Isabel Delgado; y Alimentación, Carlos Osorio.
La delegación colombiana la lidera la canciller María Ángela Holguín; acompañada del ministro para la Defensa, Luis Carlos Villegas; el titular de Hacienda, Mauricio Cárdenas; el ministro de Minas, Tomas González; junto al presidente de la empresa Colombiana de Petróleo, Juan Carlos Echeverry, y el máximo representante de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, Santiago Rojas.
El pasado 19 de agosto, tras un ataque del paramilitarismo colombiano en el que resultaron heridos tres efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Venezuela tomó acciones soberanas en Táchira, medidas que posteriormente fueron extendidas a otras entidades limítrofes con Colombia, como Zulia y Apure.
Estas medidas van dirigidas a fortalecer la lucha contra el contrabando de extracción de alimentos hacia la nación neogranadina y el narcotráfico.
La petición de Caracas fue acordar medidas conjuntas con Bogotá, mediante el diálogo bilateral, en contra del flagelo de la violencia y el contrabando de extracción, así como acciones para erradicar el ataque económico que se perpetra contra el bolívar en las casas de cambio que operan en el lado colombiano.
AVN