Opinión / Richard Canan

13.Ago.2014 / 01:11 pm / Haga un comentario

Sin desperdicio. Una vez más la fauna de intereses que cohabita alrededor de la Mesa Coja, algunos la llaman “Mesa de la Unidad Democrática” (nadie les cree ese nombre), vuelve a poner una inmensa cómica al asumir y respaldar posiciones desquiciadas, delirantes, alejadas de la realidad y del contexto mundial.

Los trastornados miembros de la extrema derecha, supuestamente lo más preclaro de la fauna opositora, irradiando su acostumbrada ceguera y falta de olfato político, enviaron un vergonzoso Comunicado (MUD, 06-08-2014) donde critican miserablemente la ayuda humanitaria que todo el pueblo de Venezuela, a lo largo y ancho del país, ha estado acopiando para enviar al asediado y masacrado pueblo Palestino. Una vez más, este pueblo venezolano es mil veces más consciente y solidario que los desatinados miembros de la MUD. Mientras el pueblo está activo, solidario, la MUD sigue fatalmente desubicada.

En dicho Comunicado no hay ni una sola línea, ni una oración, ni una palabra donde la derecha venezolana exprese o exija al Estado genocida de Israel que detenga sus mortíferos e indiscriminados bombardeos sobre hospitales, escuelas e instalaciones de la Organización de las Naciones Unidas. Nada, ni una reflexión ante la limpieza étnica y el exterminio que Israel aplica sobre el pueblo Palestino. No exige tampoco la MUD, a su socio norteamericano, que deje de proveer a Israel de sus letales armas “inteligentes”, que solo matan niños, mujeres, ancianos y civiles inocentes. No, la MUD no habla de la masacre en Palestina, no se pronuncia. Tampoco puede exigir mucho, porque sus miembros, representantes de la rancia oligarquía criolla, no son soberanos, no son independientes.

Los de la MUD han demostrado, una y otra vez, que son lacayos del imperio norteamericano y así, estando de rodillas, no pueden “percibir” que están ante un genocidio y son incapaces de manifestarse ante estos terribles crímenes. Los de la MUD carecen de la capacidad para evitar repetir sus propias torpezas. Mientras el mundo entero repudia horrorizado la masacre que ejecuta Israel en Gaza, ellos con su silencio y omisión, solo persiguen quedar bien con sus patronos del norte. Bien lame botas que han salido.

Cómo van a repudiar los disociados de la MUD el genocidio de Israel contra el pueblo Palestino, si esta gente es claramente simpatizante de la violencia fascista, del odio de clases. Estos que se rasgan las vestiduras para gritar a los cuatro vientos de que “observan con preocupación que hay opacidad en la democracia del país”, es la misma que ahora está incólume ante el genocidio contra el pueblo Palestino.

La extrema derecha aplica la doble moral y el doble rasero, y callan cuando sus propios socios asestan oprobiosos crímenes en contra del pueblo: No repudió nada la MUD cuando en abril del año 2013 su candidato presidencial, Capriles Radonski, le ordenó a sus huestes descargar la “arrechera” contra el pueblo chavista y todas las instituciones públicas a su paso, generando muertes, heridos y ataques contra partidos políticos y centros de salud.

No condenó nada la MUD, cuando su asociado más representativo del mantuanaje criollo, Leopoldo López, planificó, gestó y ejecutó el plan fascista de acabar con el hilo constitucional y democrático a través de “La Salida”, ordenando a sus huestes incendiar el país y arrasar con el chavismo, generando más muertes, más heridos y mayor aplicación del odio de la derecha fascista contra instituciones y espacios públicos (será digno de estudio para los investigadores sociales analizar el porqué de la descarga de violencia tan atroz de la derecha neofascista en contra del sistema Metro y del metrobús; estos actos vandálicos además de ser un acto de terrorismo, fueron una tremenda torpeza política, ya que afectaron principalmente a sus propios vecinos).

La ignorancia y la torpeza no tienen límites y en las crónicas del fracaso del fascismo criollo, los ataques violentos en contra del pueblo serán siempre una herida abierta. Solo la paciencia y la consciencia del pueblo venezolano, evitaron una confrontación a gran escala, de pueblo contra pueblo, como lo deseaba la derecha.

El rechazo abrumador contra las acciones de violencia de la derecha fascista, provocaron severas consecuencias políticas para sus ejecutores: bien presos y encarcelados unos; olvidados y rechazados por su propia militancia, otros. Ambos bandos de la extrema derecha quedaron sin capital político y sin fuerzas para reencontrar el apoyo de sus huestes. Por descargar la “arrechera” contra el pueblo “salieron” directo a la muerte política.

Nada dijo la MUD ante estos crímenes orquestados y dirigidos por sus miembros más “preclaros”, por los ungidos, los que se creen una especie de realeza criolla, la monarquía caraqueña, el rancio sifrinaje que perdió la cabeza y su capital político por sus desmedidas ambiciones de poder.

En el caso de Palestina, la MUD expone claramente su carencia de escrúpulos, de moral, su falta de humanidad y de dignidad. Se observan claramente sus contradicciones y la falta de criterio para acercarse a lo justo, a lo correcto. Su odio de clase y su falta de independencia les impide repudiar públicamente el terror causado por el Estado Israelí, ya que de ser solidarios con la causa Palestina, les supondría tener una causa solidaria con la Revolución Bolivariana y además tendrían que darle la espalda a sus benefactores americanos. Imaginamos que en la cúpula de la MUD calculan fríamente que, primero muertos, que bañados en sangre y jamás reconocerían ningún “pequeño crimen o genocidio” ejecutado bajo el amparo de sus patronos norteamericanos.

Frente a la cómica y los tropiezos de la Mesa Coja (MUD) está una fuerza revolucionaria cada día más robusta y consciente. Una fuerza democrática forjada y probada en más de una docena de triunfos electorales. Guiados por el coraje, la sabiduría, la moral y la energía que siempre nos impregnó nuestro Comandante Chávez. Tenemos unidad de mando, de ideas y de proyecto político, orientados todos hacia la construcción del socialismo, como quedó ratificado en el III Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela. Contamos además con el apoyo y solidaridad de docenas de países y organizaciones libres del mundo. Con estos enormes valores y principios, con la moral en alto, podemos decir al mundo con coraje, con total soberanía, con total independencia: ¡Basta del genocidio del Estado Israelí en contra del pueblo Palestino!

En la Mesa Coja (MUD) se robaron los cubiertos, los platos y hasta las servilletas. Se pelearon por el mantel y rompieron todas las sillas. Son demasiados egos juntos, demasiados intereses, demasiadas miserias.

 

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