Opinión

13.Ago.2014 / 09:12 am / Haga un comentario

Sirve en esencia para juntar uno o más esfuerzos, a los fines de concretar juntos los objetivos estratégicos trazados para los siguientes meses y diseñar y aplicar al mismo tiempo medidas tácticas que terminen de concretar en unidad acciones inmediatas y otras a mediano plazo, que permitan configurarse de una vez por todas como la fuerza política local hegemónica en todo el territorio nacional. Valga decir que es imprescindible determinar los siguientes factores para saber a quién juntarse en unidad, en qué momento construirla y por cuánto tiempo es necesaria, al mismo tiempo identificar plenamente a los adversarios.

Adversarios implícitos y explícitos

Explícitos: Para los que hacemos vida en la corriente de izquierda, revolucionaria y chavista, debemos tener claro en acción y práctica que el único enemigo y adversario natural e histórico es la derecha. Para esto debe aplicarse una política de desplazamiento permanente y el reconocimiento de los espacios que gobierna, al mismo tiempo aplicarles prácticas permanentes que desnuden su mala gestión. Es la principal premisa de unidad.

Implícitos: La batalla es contra todo el que usurpe nuestro título doctrinario en primer lugar y en segundo lugar inoculados, sirven de manera inconscientes las desviaciones, como las de tipo divisionistas o de la crítica permanente, a lo que se supone debería trabajar en la transformación de cualquier tipo de debilidad que exista o pueda existir en el proceso bolivariano y no convertirse en eruditos de casi todo y defensores a veces de alguna maniobra de la derecha. Quienes sí están abiertamente divididos y quienes no merecen ningún tipo de análisis.

Están muy claros que las peleas contra nosotros es posible a través de argumentos y propuestas en beneficio del pueblo. Es una pelea ganada porque nada de eso podemos verlos de ninguna de sus partes. No tienen unidad porque o se ponen de acuerdo para presentarle al país una propuesta distinta más que rasgar sus vestiduras por aspiraciones personalistas en territorios específicos aunque algunos tantos no dejen de ver a Miraflores cono sueño platónico.

Por eso hablemos de unidad, de nuestra unidad mientras aquella se desploma.

La nuestra está guiada por principios éticos sociales y si queremos ser la opción política hegemónica del país y no por capricho sino por la necesidad de los ciudadanos que tienen gobiernos como el de Capriles, Ocariz, Blade, entre otros…

Nuestra unidad salió fortalecida por el congreso del PSUV. Sin Chávez físicamente la responsabilidad es mayor frente a quienes seguimos permanentemente sus orientaciones ahora nos toca en su legado colectivamente crear formas nuevas de liderazgo, de este tiempo y someternos como hermanos a evaluar las mejores propuestas de transformación, de lo que queda por transformar y en aras de que sirva de llamado ciudadano, abierto y pleno. Es el chavismo el que los convoca en unidad a seguir transformando la patria desde sus propias realidades

La unidad para nosotros no es una premisa, es hecho obligatorio. Estamos obligados a hacer de las diferencias un instrumento de consenso, una valiosa herramienta generadora de propuestas transformadoras y de lucha contra las amenazas permanentes del adversario. Valgan entonces las diferencias pero bienvenido sea el consenso para la práctica revolucionaria.

El papel que nos toca a delegados y delegadas es fundamentalmente defender la unidad en torno al chavismo y Maduro como presidente por sobre todas las cosas y expresar además un apoyo irrestricto y material a la lucha contra la pobreza y a toda política de Gobierno que incida en la superación del pueblo hacia una vida mejor y digna. La unidad puede ser no más que un término demagógico si se expresa en grupos aplicando maniobras para bien propio y no se termina de convertir en el sendero que nos guíe en todas las acciones colectivas. Nos toca resistir juntos y actuar juntos. Partido y gobierno pueden superar la guerra económica y erradicar la pobreza extrema, en el primer caso porque alrededor de cada organización de base (UBCh) hay comercios que incurren en algún tipo de infracción y pueden estas servir de contraloras para acompañar luego la justa acción sancionadora del gobierno, en el segundo, en el mismo entorno de estas organizaciones que hacen vida en los sectores populares hay pobreza extrema o por lo menos algún viso de esta, por lo que no hay mejor diagnóstico para el abordaje social posterior por parte de las misiones, consejos comunales y UBCh. Para esto sirve la unidad de los patriotas, así también se materializa.

Chávez nos pidió unidad como elemento transversal en la lucha y en las diversas batallas por librar a diario para ir conquistando victorias sociales y a diario andamos de batalla en batalla, de lucha tras lucha y de victoria en victoria gracias a que comprendemos con claridad que lo primero es lo que debe prevalecer para el resto de las tareas tácticas. Como aquel 4f y el glorioso “por ahora”, hoy más que nunca debemos seguir al pie de la letra las líneas de Chávez que aunque el camino sea obscuro o incierto en él siempre está la respuesta debido a que comprendió a tiempo a qué se enfrentaba permanentemente y que hasta a hoy la coyunturas y las formas de adversar y tumbar al proceso son las mimas y las llevan los mismos actores.

La MUD casi MUD

Se desplomó, algunos que pensaron en el diálogo y en propuestas serias de un país distinto al que mal dibuja y demuestra primero Justicia, son hoy condenados por los que creen que dividiéndose ganan espacios. De aquel lado no hay alcalde para el municipio Sucre en términos de gestión, pero sí para hacer público un llamado al reencuentro nacional de organizaciones políticas de la MUD supuestamente apostado a su recomposición y sellado por la misma tolda aurinegra tenemos a un gobernador que se le olvidó serlo, opinando sobre cualquier cosa que diga el Presidente pero nunca menciona sus obras o algún detalle por pequeño que sea sobre su gestión. Aveledo, Ramos Allup y Henry Falcón son los que se salen por la baranda no por inocentes, pero menos por pendejos. Los últimos con sus acciones asumen el derrumbe de una estructura transitoria, electorera, porque ven como mejor opción para cualquier baile que venga agarrar su pedacito de pista y conseguir en el camino por lo menos una pareja que les siga el paso. Triste historia de una división anunciada.

Por: Jhonathan Sánchez – Periodista

PSUV Miranda

 

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