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Foto: Prensa AN
La Asamblea Nacional (AN) expresó su rechazo a la intervención de cualquier nación extranjera en los asuntos internos de la República Popular China, con el fin de manipular los temas exclusivos de su soberanía bajo el principio de Una Sola China.
En un acuerdo, aprobado en la sesión ordinaria de este martes, y presentado por el presidente del Grupo de Amistad Parlamentaria Venezuela-China, diputado Nicolás Maduro Guerra (PSUV/La Guaira), la Plenaria reconoció que Taiwán es una parte inalienable del territorio de China.
También se condenó cualquier acción que atente contra la integridad territorial de la nación China, que pueda amenazar la estabilidad regional y mundial. Al respecto, Maduro Guerra recordó que el imperialismo usa múltiples formas de agresión para intentar socavar la soberanía y el espíritu democrático de las naciones.
Expuso que, para tal fin, el imperialismo aplica políticas desestabilizadoras, como las sanciones. Dijo que ello es parte de un plan en contra de América Latina, y ahora contra la gran potencia, la República Popular China.
Igualmente, el acuerdo establece que el Parlamento reitera su apoyo al principio de una sola China y reconoce a su gobierno como el único legítimo para representar a toda la nación, a su derecho a vivir en paz y al ejercicio pleno de su soberanía.
Por último, la AN acordó que el documento se entregue formal y presencialmente a la representación diplomática de la República Popular China acreditada en Venezuela, como muestra del irrestricto apoyo y respaldo del pueblo venezolano a su soberanía e integridad territorial.
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