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Foto: Archivo
El dirigente político Jorge Rodríguez, manifestó este lunes que Venezuela está siendo víctima de campañas mediáticas y acciones de guerra económica, promovidas por una extrema derecha que ha conformado una agenda violenta como forma de hacer política, para atentar contra la institucionalidad democrática.
«Ellos —dijo en relación con la derecha venezolana— han hecho de la violencia una forma de desarrollo de una propuesta política, de búsqueda de poder (…) Es la confrontación entre un modelo que promueve la protección del ser humano, de nuestros niños, hombres, mujeres y ancianos, frente al modelo de la agresión y el neoliberalismo», expresó el también alcalde de Caracas durante su participación en el foro Neoliberalismo y Derechos Humanos: hablan las víctimas, que se desarrolló este lunes en el Teatro Principal, en el centro de la ciudad.
Rodríguez explicó que ese modelo de agenda violenta —que en los primeros meses de 2014 dio como resultado la muerte de 43 personas víctimas de las llamadas guarimbas, y generó situaciones de angustia en la población— obedece a un hilo conductor que se remonta a los gobiernos de la Cuarta República y sus políticas neoliberales que dieron como resultado el deterioro de la economía y la estabilidad de Venezuela.
Durante la cuarta República —explicó— «los gobiernos tenían en sus manos el aparato del Estado. Los gobiernos tenían el apoyo de Estados Unidos. Tenían además la complicidad silente de los medios de comunicación más importantes. Tenían en sus manos, también, la anuencia de los llamados organismos de los Derechos Humanos», recordó.
Como prueba de ello, nombró hechos de desaparición forzada, tortura y muerte, de la cual fueron víctimas hombres y mujeres. «Se cuentan más de 4.000 venezolanos asesinados de forma selectiva, de forma sistemática, por haber cometido el único delito de tener ideas de izquierda o de ser dirigentes estudiantiles, ser dirigentes obreros», rechazó Rodríguez, hijo del dirigente estudiantil Jorge Rodríguez, asesinado en 1976.
«Mi padre fue asesinado en los sótanos de la política derechista de Venezuela, en julio de 1976. Fue sometido a salvajes torturas durante tres días, asesinado sin ningún tipo de juicio (…) Yo jamás escuché a ninguna ONG de derechos humanos pronunciarse por estos asesinatos, ni tampoco escuché a la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos decir absolutamente nada», expresó Rodríguez, al tiempo que recordó que durante las décadas de 1960, 1970, 1980 y 1990, cientos de personas fueron asesinadas y arrojadas en fosas comunes.
«Todavía hoy la Revolución Bolivariana está rescatando la identidad de esas personas que en el pasado fueron asesinadas», informó.
La política de la paz
Rodríguez indicó que ante los escenarios de desestabilización y guerra económica que en la actualidad enfrenta el país —concentrados en su mayoría en el contrabando y acaparamiento de productos de primera necesidad— debe imponerse la paz y el respeto a los derechos humanos como política principal de la Revolución Bolivariana.
Recordó que durante 15 años de gobierno, el país ha enfrentado diferentes escenarios promovidos por la derecha en el país en contra de la democracia y el pueblo. Algunos de ellos: el golpe de Estado contra Hugo Chávez en 2002, sabotaje petrolero, y también —agregó— «guerra psicológica que ha generado neurosis en sectores importantes de la población venezolana, muy cercanos a la angustia y el odio».
«Nosotros tenemos que apegarnos a la paz, mantenernos en el respeto profundo e irrestricto a los derechos humanos, pero para poder apegarnos a la paz tenemos que hacer justicia», aseveró el alcalde, en transmisión de Venezolana de Televisión.
AVN