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Foto: Archivo
«La bandera de los Derechos Humanos (DDHH) nació en América Latina y en gran parte del mundo a través de las luchas rebeldes e insurgentes de los movimientos sociales y han buscado la emancipación de sus pueblos contra el neoliberalismo», resaltó este lunes el defensor del Pueblo, Tareck William Saab.
Durante el foro internacional Neoliberalismo y Derechos Humanos: Hablan las Víctimas, organizado por la Defensoría del Pueblo, efectuado en el Teatro Principal, en Caracas, Saab fue entático al recalcar que este tema no puede ser bandera «de quienes han exterminado y masacrado a los pueblos, de los grandes genocidas que ha conocido la humanidad y que han violado sistemáticamente los derechos humanos en el mundo».
Se refirió así a Estados Unidos, que «habla de derechos humanos mientras ataca a países que no le son afectos, siendo ese un país que no ha firmado la Convención Americana sobre Derechos Humanos de la Organización de Estados Americanos (OEA), e incluso no ha firmado el pacto internacional de derechos civiles y políticos».
Saab sostuvo que la OEA «se fue desdibujando cuando se convirtió, a partir de los años ’60, en un brazo ejecutor de las políticas estadounidenses. Estados Unidos convierte este foro en un instrumento para sus políticas de hegemonía y tomó como bandera el tema de los derechos humanos».
Por ello, el defensor destacó la necesidad de fortalecer la educación masiva en este tema a todos los niveles, desde las bases populares hasta llegar a los Estados y organismos internacionales.
Consideró positiva la tarea que ha venido ejecutando la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en cuanto a la protección de los derechos humanos.
En su intervención, Saab también refirió que han girado instrucciones a todas las defensorías del interior del país para replicar en los sectores populares actividades que lleven a debates y cursos de formación sobre los derechos humanos.
«Nosotros tenemos mucho que mostrar en materia de Derechos Humanos como nación, a partir de estos 15 años de revolución y de la Constitución aprobada en 1999, que es modelo en el mundo», enfatizó y mencionó el título III de la Carta Magna venezolana, dedicado a los derechos humanos y garantías y deberes, «que ha sido replicado por otros procesos constituyentes que se han hecho en América Latina en vista de la visión futurista que tuvo el constituyente cuando tuvimos a bien redactar ese título, el pueblo venezolano aprobarlo y el comandante Hugo Chávez en defenderlo».
AVN