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Foto: Prensa Presidencial
El escudo del pueblo en el sector salud, ante la guerra económica auspiciada por el imperialismo y la burguesía, debe ser Barrio Adentro, los Centros de Diagnóstico Integral (CDI), los Centros de Alta Tecnología (CAP), las Salas de Rehabilitación Integral (SRI), concatenadas en las Áreas de Salud Integral Comunitaria (ASIC).
«¿Cuál es el modelo que impusieron e imponen hoy?: La privatización de la salud. Y en tiempos de guerra económica la súper privatización de las clínicas y esconden los medicamentos al pueblo».
Así lo aseveró el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, durante el encuentro nacional con voceros de las ASIC, realizado en el Teatro de la Academia Militar de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Es necesario colocar en el centro de la agenda del Gobierno Bolivariano el Plan Barrio Adentro 100 por ciento, porque la salud es el derecho a la vida y no una mercancía como lo plantea el capitalismo.
La instrucción se la giró al vicepresidente Ejecutivo, Aristóbulo Istúriz; al vicepresidente del Área Social y ministro del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, Jorge Arreaza; y a la ministra del Poder Popular la Salud, Luisana Melo.
Se trata de trabajar, diariamente, para consolidar el Sistema Público Nacional de Salud, dijo el mandatario de la nación, al reiterar que solo el pueblo salva el pueblo. «Venimos del pueblo y lo más grande es ser siempre de un pueblo».
Les hizo un llamado a todos los galenos del país para que empleen su conocimiento de salud para la vida y no como mercancía. En los gobiernos de la IV República estaba planteada la privatización de la salud, pero el Comandante Chávez llegó y lo salvó, colocando al servicio del pueblo un sistema de salud gratuita y de la calidad, recordó.
«Estamos levantando las banderas hacia un tiempo mejor, hacia un tiempo futuro», dijo el presidente Maduro, al aseverar que el legado del líder de la Revolución Bolivariana continúa a pesar de las pretensiones imperiales y burguesas para detener al Gobierno Bolivariano.
Por Maryuri Varela