Noticias
La implementación de la Gran Misión Abastecimiento Soberano (GMAS), creada este año por el Ejecutivo nacional para sanear las cadenas productoras y distribuidoras de bienes esenciales, ha permitido dar respuesta a los sectores más vulnerables del país frente a la guerra no convencional que se libra en el campo económico, sostuvo el investigador y analista social Erick Rodríguez.
Luego de su ponencia «Amenazas a la Revolución Bolivariana» en la Cátedra de Guaicaipuro, realizada este jueves en la plaza Danilo Anderson de Los Teques, Rodríguez hizo un análisis crítico sobre los sectores involucrados en el asedio contra el pueblo venezolano, que se traduce en desabastecimiento y especulación, y la política del Ejecutivo para revertir esa situación.
En ese sentido, recalcó que la Asociación Nacional de Supermercados y Afines (ANSA) y Cavidea son estructuras involucradas en promover la guerra económica, pues controlan los puntos de venta en el país con el propósito de generar zozobra, descontento y malestar colectivo.
En ese escenario, la GMAS ha permitido «dar respuesta a los sectores más vulnerables y eso, cuando haces una evaluación, indiscutiblemente viene cumpliendo un cometido pero necesita llegar a otros sectores porque con la distorsión de la cadena de comercialización ha aparecido indiscutiblemente el carácter especulativo y la hiperinflación que han generado» los actores que perturban la economía, señaló en conversación en AVN.
Además, refirió Rodríguez, esta misión ha contribuido a un mejor seguimiento de los productos que ingresan a los puertos y su posterior distribución, a través del trabajo conjunto entre la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y el Poder Popular. «Nosotros estamos utilizando la logística que tiene nuestro ejército y la organización del pueblo» como una herramienta que «nos permite seguir de manera progresiva avanzando y generando nuevas estrategias».
Esta semana, por ejemplo, Bolivariana de Puertos (Bolipuertos) informó el arribo al puerto de La Guaira, estado Vargas, de 762 contenedores con alimentos, medicinas, productos de higiene personal y artículos navideños, mientras que 97.232 toneladas métricas de maíz amarillo y frijol de soya serán despachadas a la agroindustria nacional desde el puerto marítimo de Puerto Cabello, estado Carabobo.
Además, las autoridades venezolanas registran la incautación, hasta el 1 de septiembre, un total de 127.534 toneladas de alimentos desviados para el bachaqueo y la especulación, en operaciones emprendidas en todo el país.
AVN