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Foto: Captura VTV
Reafirmar la nueva propuesta histórica a partir de la Revolución Bolivariana y la confianza en este proceso es vital para enfrentar la guerra no convencional que fomentan sectores de la derecha que pretenden derrocar estos proyectos de más de 15 años, señaló Diego Sequera, analista y columnista del portal digital Misión Verdad.com.
«Tenemos más de 15 años de historia recorrida que también vale la pena revisar, más allá de la consigna o el gestionismo, darle discurso y tratar de retribuirle su relieve, su riqueza, su oferta de entidad espiritual, que la tiene porque, más allá, hay una herencia histórica que trae consigo lo mejor de la patria», dijo, en entrevista este martes en el programa El Desayuno, de Venezolana de Televisión.
Consideró que para fortalecer el combate contra la guerra no convencional que vive el país es importante socializar los argumentos que demuestran que es un hecho concreto, estudiado, diseñado y comprobado en el tiempo, con precedentes históricos inmediatos y develar el rostro de quienes están detrás de esta acción controlada por grupos de derecha.
Explicó que la guerra no convencional tiene como principal objetivo la población civil, va actualizando sus planes o guiones según las circunstancias y aprovecha debilidades internas para ir abordando las distintas esferas de la actividad de un país como la economía, la salud, seguridad, lo alimentario e incluso atenta contra la moral y la identidad nacional que, tal como expresó Sequera, está en juego y para ello utilizan tácticas como el sabotaje, la infiltración y las campañas mediáticas.
Sostuvo que es vital continuar dándole rostro al enemigo y desenmascararlo, así como recordar que este tipo de guerras tiene un precedente político desde hace más de 15 años en América Latina, donde sectores han atentado contra esa masificación de los procesos progresistas.
Sequera puntualizó que el solo hecho de que se esté apostando «a la reserva política, moral y espiritual del chavismo es un recurso no convencional contra la guerra y la cuestión es cómo protegerlo, consolidarlo y avanzar en esa dirección. Los planes sociales tienen que seguir, hay un proyecto histórico con una orientación clara de justicia».
AVN