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Foto: Archivo
“El recurso más audaz que manejan los asesores de la oposición, es un barraje publicitario intenso, cotidiano, que revele presuntas deserciones en el chavismo, nombres de personas que lo abandonan, dirigentes calificados que se marginan o se suman a la MUD, con la finalidad de crear confusión”.
Así lo refiere el periodista José Vicente Rangel, quien alerta sobre la conspiración que la derecha venezolana pretende poner en práctica días previos a los comicios parlamentarios del próximo 6 de diciembre.
Asegura que la ofensiva de la oposición está basada en la “descalificación total, ética, moral y política del gobierno de Maduro y del Psuv”, a través de las redes sociales y utilizando la tecnología para conocer información de la vida privada de líderes del chavismo.
En su columna de opinión, El Espejo, publicada este lunes en el diario Últimas Noticias, el periodista destaca que el plan de la derecha consiste en generar diariamente informaciones negativas sobre el país, a fin de “contratar espacios en medios importantes, presionar a organizaciones no gubernamentales, así como a gobiernos, para que se pronuncien sobre un fraude electoral en marcha”.
Asegura que el financiamiento está listo para conspirar contra el presidente Nicolás Maduro, a través de una estrategia conocida como “Operación Remate”. Resalta que “el pote para financiar la arremetida electoral de última hora, está lleno”.
Señala que los gobiernos y agrupaciones de derecha de “España y Alemania dan aportes importantes. Igual ocurre con partidos de derecha de países de la región como Chile, Argentina, Brasil. Y el aporte principal procede de organizaciones ultraconservadoras, de poderosos lobbys e inversionistas de Estados Unidos”
Asegura que la oposición no suscribe el acuerdo de respeto al resultado electoral del 6D, porque “no están seguros de ganar y porque si pierden podrán cantar fraude y recurrir a la violencia”.
Adicionalmente, resalta que Venezuela es, junto a otras democracias del continente, “el otro país acosado”, donde “contra Maduro existe una confabulación sin precedentes”.