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Avanzar hacia la construcción de un nuevo orden mundial de la información y de la comunicación es uno de los 21 objetivos establecidos en la Declaración de Margarita, y hacia los cuales se encaminará el Movimiento de Países No Alineados (Mnoal) durante los próximos años.
Esta línea de acción busca contrarrestar las estrategias de los monopolios de la comunicación global a través de la creación de medios y fuentes de comunicación alternativos, libres, plurales y responsables, que reflejen las realidades e intereses de los pueblos del mundo en desarrollo.
Este nuevo orden mundial de la información y de la comunicación planteado por el Mnoal rescata el espíritu del Informe MacBride, conocido también como Voces Múltiples, Un Solo Mundo, de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), y mediante el cual se propone reforzar el papel de los medios de comunicación masivos para enaltecer la cultura de la paz, la solidaridad y reducir el actual desequilibrio informativo mundial.
Para el periodista venezolano Earle Herrera la propuesta del movimiento, que celebró este mes su XVII Cumbre, reivindica la necesidad de lograr un equilibrio en el flujo de la información «frente al monopolio de la comunicación global que tienen las grandes potencias de planeta y que son dueños de las grandes agencias y de los grandes conglomerados mediáticos», lo que hace —agregó— que «el flujo de información sea absolutamente desequilibrado».
Herrera señaló vía telefónica que «a lo que se enfrentan los países no alineados es a la más grandes y colosal industria de comunicación de la historia de la humanidad» y que constituye un «orden injusto y desequilibrado».
La misma cumbre del Mnoal, desarrollada desde el 13 al 18 de septiembre en la Isla de Margarita del estado Nueva Esparta, Venezuela, fue parte de ese desequilibrio por parte de medios internacionales y agencias extranjeras, tras convertirse en blanco de los ataques desmedidos y fuente de grandes volúmenes de desinformación. De allí que los países miembros del bloque plantearon la importancia la necesidad de impulsar nuevos mecanismos de comunicación que reflejen las dinámicas soberanas de los pueblos hacia su propio desarrollo.
«El camino no es fácil. Es un camino difícil, lleno de obstáculos, porque lo que tenemos realmente al frente es un adversario colosal» que se aferra a un «viejo adagio que dice `la información es es el poder`, y si la información es el poder pues ellos tratarán de mantenerlo de su lado. Esa es la lucha que tenemos planteada los países del sur», señaló Herrera.
El profesor Herrera señaló que para avanzar hacia el tan anhelado equilibrio informativo mundial es importante hacer «sinergia entre los países no alineados, a través del esfuerzo conjunto», agregó. El también periodista dijo que un ejemplo de esto es la creación de Telesur, que difunde la voz de los pueblos pese a las arremetidas a la que se enfrenta no solo en países de primer mundo sino también en aquellos países del sur en donde el neoliberalismo ha sido restituido.
«Si realmente seguimos esa pauta de lo que significa Telesur y otra agencias del tercer mundo, como Prensa Latina, y unimos esfuerzo estoy seguro que podremos avanzar bastante para lograr ese nuevo orden de la información y de la comunicación», dijo.
Que se escuche la voz de los pueblos del sur es una necesidad impostergable, y se concreten los pasos en esa dirección con el nacimiento de ese nuevo orden mundial de la información y de la comunicación es inexorable.
AVN