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19.Ago.2016 / 01:20 pm / Haga un comentario

Foto: Misión Verdad

Foto: Misión Verdad

Dícese que el hombre es el único animal que tropieza más de una vez con la misma piedra, pero los mandatarios y cancilleres de Argentina, Brasil y Paraguay y su amo, pertenecen a una especie anterior al Homo sapiens que se estrellan mil veces contra Venezuela, monolítica roca de soberanía y dignidad que protege de su furia irracional a Mercosur, bloque de unidad que ellos quieren destruir.

Quieren sacar a cómo de lugar de Mercosur a Venezuela, “la piedra en el zapato” que impide su destrucción, pues lo que pretenden es entregar su “cadáver” al amo, para proceder a afiliarse a la Alianza Pacifico, Tratado de Libre Comercio, reencarnación del ALCA, anexionista proyecto de EEUU que en 2005, Chávez, Lula y Néstor hundieron en Mar del Plata.

Ocultan esos agentes imperiales, la más abyecta y brutal conspiración de todas las planificadas hasta ahora por EEUU, el imperio más poderoso de la historia, que ve amenazado su hegemónico proyecto de dominación planetaria por la Revolución Bolivariana, proceso creado por un gigante llamado Chávez en un país pequeño, pero gigante como él en dignidad y valentía.

Por eso fue que Obama, el Premio Nobel de la Paz que hace la guerra, declaró a Venezuela como “una amenaza extraordinaria para la seguridad nacional y la política exterior de EEUU”, medida tan irracional y absurda como la acusación que los gobiernos de Argentina, Brasil y Paraguay hacen contra ese país, donde se dio la Revolución Bolivariana, inédito y pacífico del supremo comandante.

De acuerdo con su agenda desestabilizadora, una vez apartada Venezuela del bloque y desaparecido Mercosur, buscarán también destruir el Alba, Petrocaribe, Unasur y la Celac, mecanismos de integración de la región, el sueño de Bolívar hecho realidad por impulso e inspiración de Chávez y Fidel, al que se unieron otros gobernantes progresistas y revolucionarios.

Y van más allá los conjurados porque también buscan destruir al BRICS, el bloque económico, comercial y financiero más poderoso del mundo, conformado por Brasil, Rusia, India, China y África del Sur, cuya solidaria filosofía socialista es una amenaza para los instancias similares de Occidente, de clara orientación Capitalista cuya codicia y avaricia estrangula a los países pobres del planeta.

Y como Venezuela hizo fracasar todos los pretextos leguleyos y pseudo diplomáticos que utilizaron inicialmente, procedieron a hacerlo de la forma a que están acostumbrados, “comprando” el voto de Uruguay, como se compra una baratija en el mercado, ignorando que su presidente y canciller, como los de Venezuela son insobornables.

Fue así como dos de esos fósiles vivientes que parecen escapados de las páginas de un tratado de antropología, el canciller interino brasileño José Serra y el ex presidente Fernando Henrique Cardoso, viajaron el 5 de julio a Montevideo para entrevistarse con Tabaré Vázquez, a quien le hicieron le hicieron una propuesta indecorosa que indignado, el mandatario rechazó en el acto

Cardoso, uno de los más brillantes intelectuales latinoamericanos, sociólogo, académicoque dicta cátedra en las más prestigiosas universidades estadounidenses, europeas y brasileñas, se ajusta a a ese tipo de personalidad de la que Bolívar al analizarla dijo que “el talento sin probidad es un azote”, ya que utiliza su inteligencia para hacer el mal, como lo hace atentando contra Venezuela y Mercosur.

Rodolfo Nin Novoa, ministro de Exteriores uruguayo al denunciar a ambos, dijo que lo que hicieron fue como queriendo “comprar el voto de Uruguay” para que Venezuela no accediera a la presidencia Pro tempore de Mercosur, acción que realizaron sin un ápice de vergüenza y aunque regresaron a su país con la manos vacías, ya iban pensando en la próxima maniobra sucia a cometer.

Nin Novoa en su intervención ante la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Representantes- denunció esta que el canciller Serra viniera a Uruguay a decirnos, -lo hizo público y por eso lo digo- que venían con la pretensión de que se suspendiera el traspaso y además, si se suspendía, nos iban a llevar en sus negociaciones con otros países, como queriendo comprar el voto de Uruguay.”

“La decisión adoptada por parte de nuestros socios mercosurianos es eminentemente política: lo digo con todas las letras. Se saltean lo jurídico, que es este libro que estoy mostrando, que contiene el cuerpo normativo, y aduciendo razones que no están aquí, quieren eludir, erosionar, hacer bullying a la presidencia de Venezuela. Esa es la pura verdad.”

“A mí, eso me molestó bastante, y también le molestó mucho al presidente Tabaré Vázquez. La prioridad del gobierno paraguayo es salvar al Mercosur, porque no va a haber cumplimiento por parte de algunos países la convocatoria donde se toman las resoluciones que después aprueban los ministros.

Su declaración, clara y contundente, puso al descubierto las arteras intenciones del régimen golpista de Tamer a través del canciller interino y el ex presidente brasileño, generando además de un escándalo, un impasse en las relaciones de Brasilia y Montevideo que ha conmocionado no solo a la región, sino también al mundo, que hoy sabe quien en Mercosur es el malo y quien el bueno.

Pero, “!Sorpresas te da la vida!; ¡la vida te da sorpresas! ay Dios”, dice la letra de una canción de Rubén Blades, y vaya sorpresa la recibida por Serra cuando apenas arribaba a Brasil. El canciller interino supo la noticia de que desde la Comisión de Asuntos Económicos de la Cámara de Diputados habían solicitado su comparecencia ante esa instancia del Congreso.

Desde ese bastión de dignidad y legalidad que aún sobrevive al golpe de Estado Parlamentario asestado a Dilma Rousseff, legítima mandataria, Alfonso Florense, líder del Partido de los Trabajadores, lo convocó para explique el intento de compra de voto que junto con Cardoso hizo a Tabaré Vázquez para evitar que Venezuela accediera a la Presidencia Pro Tempore de Mercosur.

Para Florence, la transcripción de la comparecencia del canciller uruguayo Nin Novoa en la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Diputados de Uruguay,”demuestra claramente que Serra intentó que Uruguay se saliera de las reglas del Mercosur.”

Pero no fue el único golpe contundente asestado a los enemigos jurados de la Revolución Bolivariana de parte de los honestos parlamentarios progresistas que aún quedan de pie en ese nido de víboras fascistas, ya que la Comisión de Asuntos Económicos del Senado rechazó la decisión del régimen interino y golpista de Michel Temer, que no reconoce la legitimidad y legalidad de la presidencia Pro tempore que ostenta Venezuela en el bloque.

El comportamiento de los funcionarios del régimen golpista brasileño es tan delictuoso que viola normas y principios del derecho internacional, como lo prueba el hecho de que 2 días antes de presentar a Tabaré su propuesta indecorosa, Serra propuso que un grupo de embajadores asumiera la dirección del bloque, en vez de Venezuela, su auténtica y legítima titular.

Lo hizo como el “Chavo”, como “sin querer queriendo”, lanzando un globo de ensayo, diciendo: “Consideramos razonable que se forme una comisión de embajadores que represente al Mercosur para dirigir informalmente hasta fin de año”(cuando le corresponderá a Argentina asumir la presidencia), propuesta tan descabellada que debió haber dejado perplejos a quienes lo escucharon.

Lo que perseguía, es lo mismo que viene haciendo el gobierno Paraguayo desde un principio, rechazando primero el ingreso de Venezuela al bloque, y una vez que se convirtió en miembro, no ha cesado en su propósito de dejarlo fuera de Mercosur como lo hizo esta vez con sus 2 socios con ese juego de palabras que es una “cantinflada.”

No se sabe a ciencia cierta, si lo que induce a esos fósiles vivientes, a hacer cosas como esas, es el odio e ira que sienten contra la Revolución Bolivariana, o la decrépita ancianidad que los afecta, y en caso de ser esto último, lo que deben provocan en vez de enojo es lástima, especialmente por Cardoso que perdió su inteligencia, para convertirse en azote del proceso de integración sudamericana.

Y también por Serra, quien en un severo ataque de la megalomanía que afecta a todos ellos, dijo el martes que “Mercosur es propiedad de los cuatro Estados fundadores: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, excluyendo a Venezuela, como si también no fuera miembro del bloque.

Su afirmación, recibió el lunes de la Cancillería venezolana una respuesta inmediata a través de un Comunicado. dirigida también al resto de esos fósiles vivientes a quienes si se les ocurriera constituir una empresa, la razón social que más se adecuaría en base a sus actividades, sería Asociación de Bandidos Peligrosos, y sus siglas ABP, por las iniciales de los países que representan.

“La República Bolivariana de Venezuela, -señala el documento- rechaza categóricamente las maniobras y falsarias antijurídicas de los gobiernos de Argentina, Paraguay e interino de Brasil, la Triple Alianza que pretenden vender la infame especie sobre el incumplimiento de Venezuela en los compromisos asumidos en el Protocolo de Adhesión al MERCOSUR, firmado el 4 de julio de 2006 y entrado en vigor hace apenas hace 4 años.”

Venezuela en este corto tiempo, no solo ha incorporado gran parte del compendio del MERCOSUR a su fuero interno, sino que incluso igualado, y en la mayoría de los casos superado a Estados Partes, que estando desde el inicio de la fundación de MERCOSUR, no han internalizado todo su acervo normativo. Venezuela ha sido insigne en el proceso de acoplamiento al Mercosur.”

La Rejpública Bolivariana de Venezuela denuncia ante la comunidad internacional la persistencia de estos gobiernos de vulnerar los tratados constitutivos de MERCOSUR, haciendo prevalecer sus preferencias políticas e ideológicas neoliberales sobre los genuinos intereses de los pueblos y sus procesos de integración.”

“Funcionarios de esta reeditada Triple Alianza, caracterizados por el golpismo, extremismo e intolerancia intentan desplazar su accionar hacia el MERCOSUR, desconociendo sus principios, irrespetando sus normas y vulnerando el derecho al desarrollo de los pueblos que conforman este mecanismo de integración productiva y comercial.”

“La República Bolivariana de Venezuela, en ejercicio pleno de la Presidencia Pro Tempore de MERCOSUR, defenderá a este bloque de los zarpazos contra su institucionalidad acometidos por sus enemigos históricos, que mal colocan a MERCOSUR en su relacionamiento internacional y atentan contra su propia existencia.”

Por su parte, el Presidente venezolano, Nicolás Maduro, les envió un mensaje, que deberían tomar muy en cuenta los que pretenden no solo impedirle a Venezuela ocupar la presidencia del bloque regional que por derecho inalienable le corresponde, diciéndoles con la claridad meridiana que caracteriza todas y cada una de sus afirmaciones que:

“Venezuela es miembro de MERCOSUR y de ahí no nos saca nada ni nadie.”

Plenamente establecida la razón que tiene Venezuela, tal como lo ha hecho, de ocupar la Presidencia Pro Témpore de Mercosur, queda todvía un espacio de reflexión sincera que le corresponde asumir a quienes en un acto de insensatez cometieron el error histórico de atentar contra el legítimo derecho de un país y a buscar la destrucción de un mecanismo de integración que aspira lograr el desarrollo integral de los pueblos para lo cual fue creado.

De no escuchar la voz de la razón, la otra opción que les queda, es abandonar MERCOSUR, hipnotizados por los cantos de sirena que de hacerles caso los llevarían irremisiblemente a estrellarse contra las rocas de la sumisión económica y política, baratijas que a cambio de sus ingentes riquezas les piensa dar la Unión Pacífico, reencarnación del anexionista ALCA que naufragó en Mar del Plata.

Tendrán que irse solos, porque, como dijo Maduro “a Venezuela de Mercosur no nos saca nada ni nadie”, y dispuesto está, junto con Tabaré en Uruguay y Evo en Bolivia, que hace tiempo tramita su ingreso al bloque, a reconfigurar esa herramienta orientada a convertir a Sudamerica en el polo mundial de desarrollo que el visionario Chávez vislumbró para ella en el V Plan de la Nación.

Y si arrepentidos, los que piensan irse, lo hacen y llegasen a volver, arrepentidos a tocar las puertas de Mercosur, las hallarán abiertas, con la única condición de que no vuelvan a atentar contra la existencia de un mecanismo de integración, retazo del sueño de Bolívar que Maduro, Tabaré y Evo, dispuestos están a reconstruir de la mano de los pueblos de la Patria Grande cuyo amor y esfuerzo la harán aún más grande.

Ese es el reto que enfrentan quienes como ellos buscan la felicidad de sus pueblos más allá de la mezquindad y el egoísmo que en otros inculcó el Capitalismo con su modelo Neoliberal, y lo lograrán, porque como dijo Bolívar: “Dios concede la victoria a la Constancia.

AVN

 

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